Si hay algo que siempre será un misterio para el humano, es sin duda los sentimientos, ya que cada uno de ellos son tan complejos de entender como de expresar, sin embargo, el que más estudios ha generado a lo largo de la historia es… el amor. Sí, este sentimiento es el sanador del alma como el personaje principal en varias narraciones trágicas, como la de Romeo y Julieta y muchas más de la mitología griega, pero ¿En que radica nuestra obsesión por esa figura omnipresente y latente?. Los estudios científicos han explicado que gracias a las diversas toxinas que segregamos a la hora de enamorarnos, es lo que hace tan adictiva esta sensación para el humano, no obstante, hablar sobre amor es tratar de desenredar uno de los enigmas milenarios, puesto que conseguir la fórmula para una relación perfecta tiene muchas vertientes y variantes, más no imposible, sin embargo, con los cambios sociales a través de los años y la era digital, alcanzar la estabilidad emocional cada día es más difícil.
El amor en tiempos modernos es todo un tópico extenso, y es que gracias a la llegada del mundo cibernético también ha mutado nuestra forma de relacionarnos y de encontrar pareja hoy en día. Gracias a diversas aplicaciones de citas que tenemos, las probabilidades de ser soltero han disminuido. Estas apps se encargan de que puedas tener la capacidad de conocer gente en línea sin tener que salir de casa, para posteriormente poder verse en persona en caso de haber click entre los interesados. Así es, nuestra alma gemela esta solamente a un click o match de distancia.
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Por otro lado los avances tecnológicos también han pensado en una interacción comunicativa de robots y humanoides, para facilitar y acrecentar el dialogo entre humano y máquina. Las grandes empresas dedicadas a la creación de humanoides cada día superan sus metas al crear maquinas muy parecidas a la anatomía humana, con habilidades y conocimiento fluido para sostener platicas con base en cualquier tema.
El amor digital y el cine
El cine como medio de expresión que es, ha buscado a lo largo de estos años darnos historias que plantean la metamorfosis en cuestiones del amor, y es que gracias al cine de ciencia ficción hemos podido ver romances cibernéticos que marcan un antes y un después en nuestra sociedad por muy descabellado que puedan ser. Entre algunos de estos filmes, podemos encontrar: “Que duro es el amor” (2021), “Her” (2013) “S1m0ne” (2002), “Jexi” (2019) y muchas otras más, no obstante, en este 2022 llegó a las pantallas grandes una comedia romántica que esboza lo que podría ser el amor entre un humanoide y un humano, dicha cinta fue titulada como, “El hombre perfecto”.
Humanoides vs el amor imperfecto
El hombre perfecto, es una película alemana, que fue escrita y dirigida por María Schrader, conocida por su filme de “Love life” (2007). Estuvo protagonizada por Maren Eggert, Dan Stevens y Sandra Hüller. La cinta fue seleccionada para participar en la categoría de mejor película extranjera en la entrega número 94 de los premios Oscar, no obstante, solo quedó como finalista, ya que no pudo entrar en la lista de nominados finales.
Hablemos sobre la trama de esta cinta. La historia nos llevar por la vida de Alma (Eggert), una antropóloga berlinesa que busca conseguir fondos para sobrellevar su estudio sobre grabados de poesía antigua. Un día, súbitamente decide ingresar a un pequeño experimento, el cual será remunerado económicamente. Dicho ensayo consta de convivir por tres semanas con un robot humanoide, el cual está hecho específicamente a su medida desde lo físico hasta lo personal, todo esto con la intención de que su experiencia sea lo más cercano a la perfección. Al finalizar su convivencia con este humanoide, Alma tendrá que dictaminar si estos nuevos acompañantes de plástico y circuitos están capacitados para la convivencia humana, al grado de poder otorgarles derechos humanos.
La relación de Alma con Tom (Stevens) al principio se verá complicada y hasta forzada, y es que nuestra antropóloga solo quiere que dicho experimento finalice y pueda regresar a Tom a la empresa, por otro lado, nuestro humanoide perfecto busca saciar las necesidades y berrinches de Alma al costo que sea. Tom actualiza su sistema y preferencias cada noche para poder encontrar el equilibro racional y comunicativo entre Alma y él.
Los días pasan y la relación entre humano y humanoide comienzan a tener sus cambios, y es que Tom descubre que Alma se encuentra cerrada emocionalmente desde la partida de su ex pareja, lo cual implica un reto nuevo para este robot que trata de encajar en la vida de la antropóloga. Tom intenta acoplarse y entender el interior de Alma, lo que genera que poco a poco ambos vayan comprendiéndose al grado de sentir una verdadera chispa.
Alma se encontrará en una paradoja, y es que por un lado su parte humana considera que dar crédito a este nuevo logro de relación humano y humanoide podría acabar con la relación humana, ya que al vernos acostumbrados a una relación perfecta, la comunicación “imperfecta” será imposible, no obstante, otra parte de Alma sabe que en este experimento ella ha perdido, puesto que lo que parecía improbable en su vida se volvió realidad, ya que nuestra antropóloga cayó enamorada de aquel “hombre perfecto”, lo cual imposibilita a la hora de dar su respuesta final a este experiencia.
El filme busca acercarnos a un posible futuro, si bien aún no llegamos a ese grado, el tiempo cada día se acerca más a ese destino. Así que la próxima vez que estés en búsqueda de una pareja, recuerda que no pienses en la perfección, ya que esa no es posible en la relación entre humanos, sin embargo, si el resultado no es lo que esperas, no te preocupes, aguarda unos cuantos años y ten por seguridad que la tecnología te ayudará a encontrar a esa persona perfecta.
