Hubo una banda que inicio su camino en el rock en español en 1968, tocaban canciones con una influenza marcada en el rock en inglés y el blues. Ese grupo fue una de las bandas más importantes del Festival de Avandaro y décadas después cerró como banda estrella el Festival Vive Latino.
Dicen que cuando más intentas planificar una idea, muchas veces no resulta como lo pensaste; de pronto el plan se puede venir abajo, o en caso del Festival Avandaro y el Vive Latino, resultar en los festivales más exitosos de la historia del rock en México.
La represión estudiantil de finales de los años 60’s
México no siempre fue ese país obligado para las bandas del rock en español. A finales de los años 60’s el país había estado en los ojos del mundo por haber organizado unos Juegos Olímpicos en 1968 y el Mundial de Futbol de 1970, además de los vergonzoso eventos de ‘la matanza de Tlatelolco’ y ‘el Halconazo’. Los levantamientos estudiantiles y la represión gubernamental en Latinoamérica estaba en su éxtasis en aquella época. Era poca o nula la expresión estudiantil y en la mayoría de casos perseguida hasta el asesinato de miles de estudiantes en todo el continente.
En 1969 se había celebrado en Woodstock, estado de Nueva York, el Festival Woodstock. Un festival multicultural que reunió bandas como: The Who, Neil Young, Jimi Hendrix, Janis Joplin, Creedence Clearwater Revival y Santana (presente en esta edición del Vive Latino). Un ejemplo a nivel mundial del levantamiento pacifista y también el descontrol hippie entre drogas, excesos y la música como arma de protesta contra los gobiernos.
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El nacimiento del ‘Festival’ en México
Fue entonces que los hermanos Eduardo y Alfonso López Negrete, dueños de la Promotora GO SA; el ejecutivo McCann Erickson, fundador de McCann, una de las agencias promotoras más importantes del mundo; Justino Compeán , ex presidente de la Federación Mexicana de Futbol; y Luis de Llano Macedo, productor de Telesistema Mexicano (hoy Televisa), decidieron crear un festival basándose en lo ocurrido en 1969 en Woodstock.
La organización incluía un terreno sobre Avandaro donde se realizarían 12 espectáculos musicales, algunas actividades culturales y el cierre con carreras de autos. Se involucraron medios de comunicación como Radio Juventud y Telesistema Mexicano, además del apoyo de varias marcas importantes como Coca Cola Company.
El festival estaba planeado fuera para a penas 25 mil personas, cifra que se superó hasta alcanzar más de 300 mil personas. El concierto sobrepasó lo esperado y se salió de control, la lluvia, al igual que en Woodstock, genero un escenario insalubre que provocó varios enfermos estomacales, sin mencionar las congestiones alcohólicas e intoxicaciones por pastillas y marihuana además de algunos descalabrados.
Hablemos del Vive Latino
Si bien en la época de los 90’s había terminado ese furor de la época hippie y el himno de amor y paz, ahora estábamos en la época grunge. En 1999 la Universidad Nacional Autónoma de México entraba en una huelga que se prolongaría casi un año, MTV tenía un gran impacto al proyectar videos que antes eran censurados de casi todos los géneros del rock, la apertura (poca aún) del gobierno y sobre todo las diferentes agencias que nuevamente se atrevían a traer grandes grupos y artistas al país dio inicio a los planes de crear un festival musical.
Jorge Puig, entonces locutor de la Ibero, motivado por ese empuje que sobrevivía del ‘rock en tu idioma’ de los 80’s y 90’s, decidió junto a OCESA, organizar el Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino.
La organización pudiera haber resultado más sencilla que lo que sucedió con Avándaro. OCESA ya organizaba conciertos y tenía la experiencia necesario, además de contar con el escenario idóneo para tal concierto: el Foro Sol. Recordemos que fue esa empresa que 5 años antes habían logrado traer a Madonna y con eso haber organizado el primer concierto de ese recinto.
El Foro había tenido hasta 40 mil espectadores en otros eventos, sin embargo en Vive de 1998 a penas alcanzó para atraer 25 mil personas. Se agotó la comida, hubo consumos de drogas dentro del lugar y los exceso de alcohol no salieron desapercibidos (afortunadamente también se acabó).
El festival duró dos días y estuvieron bandas como: Café Tacuba, Molotov, El Gran Silencio, La Lupita, Ely Guerra, La Ley y Santa Sabina. Parecería que eso era lo más importante para atraer gente, pero la falta de organización en los detalles hizo que el festival no tuviera el éxito esperado.
Al siguiente año el festival no se celebró por razones aún desconocidas (quizá fue por el fracaso de la primera edición), sin embrago en el 2000 volvió hasta convertirse en lo que es hoy en día.
Se sale de control y se convierte en un éxito: El Vive sigue más vivo que nunca
Avandaro y el Vive son dos ejemplos del éxito que puede tener un sueño rockero, los organizadores es obvio lo veían como un negocio, pero las ganas de crear un concepto de rock nacional y levantar la voz fue el impulso necesario para al final saber hacer las cosas.
El mercado del rock nacional e hispano está viviendo una decadencia, o por lo menos no tiene el impulso ni el número de seguidores de otras épocas. Sin embargo el Vive sigue de pie, quien sabe, tal vez un día pudiéramos presenciar la segunda edición del Festival Avándaro.
¿Quién ha estado en ambos festivales?
Hubo una banda que inicio su camino en el rock en español en 1968, su nombre era Three Souls in My Mind, tocaban canciones con una influenza marcada en el rock en inglés y el blues. Ese grupo fue una de las bandas más importantes del Festival de Avandaro.
En 1998, la banda había cambiado su nombre, hoy la conocemos como El Tri, comandados por Alex Lora y quienes estuvieron en la primera edición del Vive y también estarán en esta edición.
La importancia de esta banda es muy relevante, pues ellos han visto pasar la historia del rock en México y siguen en activo. Pero lo más extraordinario es que en 1971 iban a ser una de las bandas importantes del cartel de Avandaro, aún no se sabía si cerrarían el festival.
A las 9 A.M. comenzaron a tocar, llevaban una hora haciéndolo cuando comenzaron las fallas técnicas producto de la lluvia. Era un domingo 12 de septiembre y con su presentación, se dio por cerrado el Festival.
En el Vive de 1998 se planificó que el Tri cerraría en el escenario principal la primera edición del Vive Latino (también tuvieron problemas técnicos en esta presentación), por lo que El Tri de México no solo participó en ambos festivales, sino que fue la banda que tuvo el honor de cerrar ambos.
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Fotos: Graciela Iturbide y Vive Latino
