Ciertamente se sabe poco de la incidencia de la cultura negra en la historia, no solo norteamericana sino mundial. Sin embargo, sus portavoces culturales se han encargado de difundir desde su posición la importancia que tiene la raza negra. En el cine, Jordan Peele es uno de esos portavoces que este año ha vuelto con ‘Nope’.
La cinta cuenta la historia de Otis Haywood, “OJ”, y los extraños sucesos que vive desde el día en que su padre pierde la vida por la extraña caída de objetos del cielo. La versión oficial sobre la muerte dice que esos objetos cayeron de un avión, pero está poco convencido porque los caballos que domestica y entrena para la industria del cine comienzan a comportarse de forma extraña después de lo sucedido. Un día uno de ellos escapa y en su búsqueda se da cuenta que un objeto volador no identificado recorre las nubes del rancho donde se encuentra.
Su hermana, Emeralda Haywood, “Em”, también es parte de ese inquietante y perturbador momento, por lo que se disponen a grabar el testimonio de aquel objeto, pero, a diferencia de esos vídeos de baja calidad sobre OVNIS, ellos se proponen a grabarlo con la mejor calidad posible. Con el tiempo se darán cuenta que se han metido en un grave lío cuando el objeto percibe que quieren llamar su atención y solo les traerá fatídicas consecuencias.
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La tensión que se vive por momentos es comparable a la que recreo Signs (Señales, 2002) de M. Night Shyamalan, con los escenarios de campo en los que la naturaleza permite explorar la forma de la especie a la que se enfrentan; recuerdos para conocer aspectos en el comportamiento que servirán para una posible solución al problema y por supuesto el rol de la sociedad ingenua que lo considera como una distracción o una oportunidad de generar ganancia sobre ello.
A pesar de tener características propias del cine de ciencia ficción, Nope se desprende del discurso de esas películas recuperando lo que Jordan Peele sabe hacer muy bien: sembrar la intriga en sus espectadores. Detalles narrativos están socializando un tema que parece entendido, pero en realidad sólo conocemos por lo que se ha dicho y visto en grabaciones de baja calidad e investigaciones sesgadas por las autoridades.
Algo que me parece importante resaltar es el valor de la historia negra dentro del discurso de la sociedad norteamericana. Para mí ese es uno de los grandes aciertos de la cinta que incluso el propio director festeja como parte de la inclusión no forzada del cine negro en temas no precisamente políticos como en “BlacKkKlansman” (El inflitrado del KKKlan, 2018) o “Judas and the Black Messiah” (Judas y el Mesías Negro, 2021).
OJ y Em son entrenadores de caballos por tradición familiar y cuando presentan su negocio preguntan por aquel hombre negro a caballo protagonista de la primera secuencia en movimiento que, curiosamente, es su trastatarabuelo Alistair E. Haywood. Señalo esto porque a partir de ahí surge lo que mencioné anteriormente.
El hecho de contar con actores como Daniel Kaluuya y Keke Palmer interpretando magistralmente a los hermanos Haywood hace que la historia fluya por la química que hay entre ambos y nos entrega una fascinante película de OVNIS a partir de la historia de aquel jinete de raza negra de las imágenes en movimiento; enfatiza la cultura negra dentro de la historia, en este caso de la fotografía; así que, ¿por qué no habrían de ser los primeros en retratar en buena calidad a un extraterrestre?
Nope es una cinta que explora el horror, el drama, la sátira, crítica y humor. No se puede encasillar en un solo género, pero para efectos de clasificación se tiene que quedar con el de ciencia ficción, aunque su mensaje y efectos tengan una enorme resonancia en el mundo del cine y entre la sociedad y eso es lo que ha hecho destacar el nuevo trabajo de Jordan Peele.
Título: Nope. Año: 2022. Director: Jordan Peele. Duración: 130 min.
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