H.P. Lovecraft y su estilo extravagante de escritura y algunos detalles que contribuyeron a que esta se forjara como una de las más respetadas, pero igualmente temidas y quien es considerado por muchos como “el gran innovador del género literario de terror”.
Uno de los géneros literarios preferidos de muchos lectores, y también; proyector de incontables mundos que, a más de uno, han logrado cautivar pese a despertar constantes sentimientos miedo y angustia.
De acuerdo con Noël Carroll, la característica más importante de dicho género es justamente la de despertar ese efecto de terror en quien lo lee. En su libro, “The Philosophy of horror” (además de hacer una investigación filosófica del terror) expone algunas obras literarias pertenecientes a dicho género con la finalidad de indagar en sus características, sus similitudes y diferencias. Inclusive, entre sus páginas se repasan las tramas básicas y habituales en las que los escritores se basan al momento de plasmar una historia de terror. Y, de hecho, a lo largo de la historia, han sido muchos de estos escritores los que han logrado sobresalir en esta categoría. Por mencionar a algunos, vale la pena recordar a Theodore Eibon Donald Klein, Thomas Ligotti, Mary Shelley, Edgar Allan Poe; Ramsey Campbell, y Stephen King. No obstante, en esta ocasión, hablaremos a detalle sobre un escritor en especial: Howard Phillips Lovecraft, mejor conocido como H.P. Lovecraft, y quien es considerado por muchos como “el gran innovador del género literario de terror”, apenas superado ligeramente por Edgar Allan Poe, y Stephen King.
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Su estilo extravagante de escritura y algunos detalles que contribuyeron a que esta se forjara como una de las más respetadas, pero igualmente temidas; serán expuestas a continuación, en el siguiente artículo.
Su peculiar trayectoria
Nacido en Providence (Rhode Island, Estados Unidos) el 20 de agosto de 1890, Howard, se desenvolvió en medio de un núcleo familiar tormentoso, pues cuando apenas era un niño su padre pereció al interior de un hospital psiquiátrico, mientras que su madre, Sara Phillips, se caracterizaba por ser una madre en extremo conservadora y poco cariñosa, quien, a su vez, lo apartaba de toda persona que ella considerase “inferior”.
A los dos años de edad, Lovecraft; comenzó a dar sus primeros indicios de ser un niño prodigio, pues fue justamente a esa edad cuando recitaba sus primeras poesías, mientras que a los tres empezó a leer. Para cuando Lovecraft llegó a los 16 él ya había escrito una columna de astronomía para el Providence tribune.
Una de las curiosidades más grandes sobre Phillips acerca de la fuente de inspiración en la que se basaba para escribir es que esta, provenía de sus pesadillas, de las cuales, logró proyectar en algunas de sus obras.
De entre sus creaciones más conocidas podemos hallar; los mitos de Cthulhu, (debe mencionarse que no constan de una saga como muchos creen, sino más bien, una recolección de relatos de distintos autores pertenecientes al siglo XX). Resalta la esencia de la mitología de los primogénitos. Este escrito, es probablemente el más característico y conocido de Lovecraft. Sin embargo, existen otros que resaltan de igual forma (aunque quizá en menor proporción) como lo son: “La ciudad sin nombre», “El ceremonial», “el color que cayó del cielo», “el caso de Charles Dexter Ward»; «El horror de Dunwich», «El que susurra en las tinieblas», «La sombra sobre Innsmouth»; «En las montañas de la locura», «Los sueños en la casa de la bruja», «La cosa en el umbral», «La sombra fuera del tiempo», y «El morador de las tinieblas».
Curiosidades sobre H.P. Lovecraft
Pese a la relación tan distante que existía entre Lovecraft y su madre, Susan; ambos mantuvieron correspondencia frecuentemente hasta el día en que ella murió, al interior del Butler hospital, el mismo sitio en el que años atrás, había muerto, Winfield Scott Lovecraft; su padre.
A Lovecraft, le agradaba mantenerse recluido en casa durante el día. Solo salía de esta al caer del sol, pues todas las noches, se mantenía despierto hasta muy tarde, estudiando química y astronomía.
Otra curiosidad que es digna de mencionar es que Lovecraft trabajó para Harry Houdini, y no solo eso; el mago e ilusionista americano fue una fuente de inspiración para uno de los escritos de Lovecraft, («Bajo la pirámide»).
H.P. Lovecraft murió por cáncer intestinal el 15 de marzo del año 1937, en Providence; a la edad de 46 años.