Finalmente, un nuevo año ha llegado a nuestras vidas, luego de tantos penosos acontecimientos que nos hicieron estremecer durante los años anteriores. La esperanza de un nuevo comienzo toca hasta nuestra puerta. Los anhelos de obtener un mejor trabajo, una estabilidad económica satisfactoria, ¿Y por qué no?, la promesa de un nuevo amor, son latentes. Al rededor del mundo se celebra la llegada de un año más, aunque las maneras de hacerlo, son distintas y realmente asombrosas. Mientras nosotros ingerimos las acostumbradas uvas por cada mes del año, otras personas salen de sus casas con maleta en mano, recorriendo las calles cercanas con el deseo de poder viajar el próximo año. Cada ritual que se realiza en año nuevo es único y al mismo tiempo, sumamente peculiar. En esta ocasión, hablaremos de esos rituales que pese a ser tan poco conocidos, se realizan con jubilo en diversos países; los cuales, seguramente te harán explotar la cabeza. Sin más rodeos entonces, conozcamos algunos de ellos.
En búsqueda de mensajes
A pesar de que no son rituales que en conciso buscan atraer la buena suerte, en muchos países se llevan a cabo ciertas costumbres que tienen por objeto conocer lo que más adelante nos deparará el próximo año. En países como Finlandia, las personas tienden a derretir un poco de plomo sobre una cubeta de agua fría para que el metal comience a formar figuras las cuales, puedan posteriormente ser interpretadas como mensajes o augurios; un intento bastante sencillo por adivinar el destino que se nos tendrá reservado. Es en esta fecha cuando las personas también suelen recurrir a las ya conocidas lecturas de tarot, pues se cree que la energía que se desprende para antes de que el año nuevo llegue favorece a que el destino pueda verse con mayor claridad; y bueno, seguro que estas costumbres no te parecen en lo absoluto extrañas, sin embargo, llegó el momento de presentar a la que sin duda es una de las más excéntricas sobre la faz de la tierra, como la que tiene lugar en Rumanía, en donde los granjeros tienen la costumbre de hablar con sus vacas. Esta costumbre dictamina que aquel granjero que consiga entender un poco de lo que su vaca dice será sinónimo de mal augurio, y (acorde a mi opinión personal) de un desequilibrio mental bastante preocupante.
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Cada ritual es un mundo
«No juegues con la comida»; cuántas veces escuchamos este sermón por parte de nuestros padres cuando aún éramos niños. Cuando gustábamos de mezclar y combinar lo que ponían en nuestro plato. En Irlanda, esta frase pierde total relevancia cuando de se trataba de darle la bienvenida al año nuevo. Las personas golpean fuertemente las paredes con rebanadas de pan, esto para asegurar que durante el año que se avecina el alimento se encuentre asegurado para sus familias. En Dinamarca, por ejemplo las personas suelen estrellar platos contra las puertas de vecinos y amigos. En este mismo país, también tiene lugar uno de los rituales más singulares sobre la faz de la tierra. Justo cuando la media noche llega, se colocan dos sillas, una frente a la otra, sobre las que las personas deben de saltar para ahuyentar a los malos espíritus, (no sé ustedes, pero quizá además de garantizar que ningún espíritu maligno se manifieste, seguro también garantiza una que otra visita al hospital a causa de las caídas que probablemente se llevan aquellos desafortunados que dan un brinco en falso). Sí, por lo que hemos visto, en cada país se lleva a cabo un ritual que busque garantizar buena suerte y prosperidad a nuestras vidas. Espero que en tu caso, sin importar de dónde seas y que ritual decidieras realizar, tengas un feliz y dichoso año 2022; en el que las bendiciones nunca falten en tu vida.
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Foto portada: fuente / marca.com