‘Leif the Lucky’, el puente que conecta América con Europa

Hay lugares en el mundo que nos sorprenden con su cultura, su gastronomía, su arquitectura, sus paisajes, su gente y con muchas otras maravillas; viajes que  nos ofrecen muchas maravillas a la hora de visitarlos.

Islandia una pequeña isla europea; tiene rincones únicos que ningún otro país tiene; es una tierra llena de auroras boreales, cascadas, paisajes de ensueño, carreteras infinitas y muchas cosas más; además tiene un pequeño plus, es un sitio donde los viajeros tendrán la posibilidad de cruzar dos continente en cuestión de segundos. ¿Es posible hacer eso? Claro que es posible y el lugar para hacerlo se encuentra en éste país.

Esta isla está situada al este de Groenlandia en el océano Atlántico norte y al sur del círculo polar ártico, está posicionada literalmente sobre ambos continentes, destaca por estar sobre una zona de contacto entre las placas Euroasiática y Norteamericana, lo que puede apreciarse en ciertas partes de la isla.

El lugar exacto para poder apreciar la separación de la tierra, se encuentra en la región sudoeste de Islandia, específicamente en la península de Reykjanes, en dicho lugar hay una actividad volcánica muy intensa, al igual que toda la isla, no en vano Islandia tiene más de 200 volcanes y al menos 30 de ellos, han entrado en erupción a lo largo de la historia de la isla. Aquí es el punto de encuentro de las placas tectónicas Euroasiática y Norteamericana, representando una línea de ruptura geológica. Estas dos placas son divergentes y están en continuo distanciamiento formando fracturas lineales o fisuras, lo anterior debido a las tensiones creadas por la tensión que se acumula a medida que las placas se alejan unas de otras. Podemos decir que Islandia está dividida por una gran falla que cruza el país.

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Visitar Thingvellir, un parque nacional localizado en la península de Reykjanes, permite llegar al sitio que conecta América y Europa.

Se trata del Puente ‘Leif the Lucky’, el cual se extiende entre ambas placas y acerca las dos partes de la tierra creadas por la separación de la tierra o rift (cada año se separan alrededor de dos centímetros).

El puente es una pequeña pasarela sobre una gran fisura, evidenciándose claramente, como éstas placas van separándose. Representa el símbolo de la conexión entre Europa y América.

Dicha pasarela, cruza un río de arena volcánica negra que sirve de unión entre la placa tectónica americana y la europea. Se dice que este punto de Islandia y dos lugares que se encuentran en África, son los únicos lugares donde podemos observar éste fenómeno a nivel de superficie.

Se puede pasear sobre el puente o descender bajo él para pisar sobre la propia fisura entre las placas tectónicas de la Dorsal Atlántica.

Esta pasarela entre dos continentes homenajea al explorador Leif Ericson, primer irlandés en pisar Norteamerica hace 1000 años.

En medio del puente hay dos inscripciones, una de cada lado de la placa: “Bienvenido a América”, en un lado, “Bienvenido a Europa” en otro; es decir dos placas una de cada lado del puente dan la bienvenida al viajero: una desde América y la otra de Europa.

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Cruzar el puente permite tener una buena perspectiva (y situarse en medio) de las dos placas continentales, proporcionando a quien lo pisa, una clara evidencia de la presencia de las divergencias de las placas tectónicas de América del Norte y Eurasia.

Este puente es solo una de las atracciones de ésta falla, conocida por su espectacularidad natural y las actividades que se realizan a su alrededor. Cerca del mismo se puede visitar la Laguna Azul y el campo geotermal de Gunnuhver.

Con nuestros propios ojos, podemos  ser testigos la fuerza de la tierra y como ésta se separa de manera natural.

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