Sobre la calzada México-Tacuba a unos pasos del metro Normal en la Alcaldía Miguel Hidalgo se encuentra una de las construcciones más antiguas y emblemáticas de la Ciudad de México, hablo del Edificio de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros mejor conocida como “La Normal” ¿Lo conoces?
Esta escuela que en sus inicios se llamaba Escuela Normal para profesores de Instrucción Primaria fue fundada el 24 de febrero de 1887. En los años veinte ocupaba parte del antiguo casco de la Hacienda de Santo Tomás. Durante la presidencia de Manuel Ávila Camacho, el Secretario de Educación Pública Jaime Torres Bodet hizo la petición de edificar una construcción que albergara a la Escuela Normal. Después de cumplir sus primeros cien años fue nombrada Benemérita Escuela Nacional de Maestros.
Esta hermosa construcción es obra del arquitecto y urbanista Mario Pani Darqui, su edificación comenzó en el año 1945 y fue inaugurado el 7 de noviembre de 1948. Este espectacular edificio alberga un importante acervo cultural e histórico, donde podemos encontrar variadas formas de expresión artística como la pintura de José Clemente Orozco y la escultura de Luis Ortiz Monasterio.
En esta ocasión les contaré de forma general la historia sobre los imponentes frontispicios del edificio principal de esta Honorable Institución.
¿Qué es un frontispicio?
En arquitectura, frontispicio es un elemento arquitectónico constituido, genéricamente, por los elementos decorativos de la parte frontal de una construcción, sobre todo en el área de la fachada. Su composición refleja el periodo histórico de la obra arquitectónica, siendo característico de una escuela.
Sobre Luis Ortiz Monasterio
Nació el 23 de agosto de 1906 en la Ciudad de México. Fue alumno de la Escuela Normal para Maestros, tras un año de estancia se retiró y comenzó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes, posteriormente estudio dibujo, grabado y escultura en la Academia de San Carlos. Entre su amplio repertorio de obras monumentales de talla directa en piedra, que reinterpretan la tradición plástica azteca, destacan El llamado a la Revolución, El esclavo, La fuente de Netzahualcóyotl en Chapultepec, y los altorrelieves de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros.
En 1967 ganó el Premio Nacional de Bellas Artes. En 1968, fue miembro fundador de la Academia de Artes. Desde la década de 1960, se dedicó a la realización de obras de pequeño formato o de caballete. Murió el 16 de febrero de 1990.
Los frontispicios de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros
Tallados sobre cantera fina por el talentoso y reconocido escultor mexicano Luis Ortiz Monasterio, los frontispicios de la B.E.N.M. (siglas de Benemérita Escuela Nacional de Maestros) tienen 60 metros de largo por 6 de ancho y están divididos en 14 escenas que miden 3 metros de alto por 3.50 metros de ancho cada uno y están sostenidos por columnas de estilo griego.
Los frontispicios están divididos en dos partes, en el lado izquierdo encontramos personajes masculinos que hacían referencia a la Escuela Normal para Maestros y del lado derecho todos los personajes centrales son mujeres ya que en esta parte del edificio estaba la Escuela Normal para Maestras.
Del lado derecho de este altorrelieve encontramos etapas sobresalientes de la cultura mundial: la prehistoria, las religiones, Grecia, el Medievo, el Renacimiento, la Revolución Francesa y la época contemporánea en la que una figura central representando a la Ciencia, sostiene una palanca, símbolo de una nueva época.
También se observan figuras como las de Albert Einstein y Luis Pasteur. Al fondo, elementos mecánicos como engranes, poleas, un zepelín y una calavera estilizada, simbolizando la muerte. Es una advertencia ante la atomización y refleja el temor de la época a que ocurriese un cataclismo nuclear. (Óscar Molina Palestina, 2012).
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En el frontispicio izquierdo los siete relieves presentan la historia nacional de México comenzando por la época Precortesiana, la Colonia, la Independencia, la Reforma, el Porfiriato, la Revolución y la época actual en donde se aprecia la figura de un maestro sosteniendo un libro símbolo de la educación, a la izquierda de este un campesino, a la derecha un obrero representando el trabajo y la producción, al fondo los frontispicios de la B.E.N.M. y una torre de petróleo que alude a la emancipación económica y política que conduce al nuevo futuro de México.
Esta majestuosa manifestación de talento, creatividad y habilidad artística por parte de Luis Ortiz Monasterio tiene como intención mostrarnos a través de un recorrido visual las principales etapas de la historia universal y nacional. Más que una decoración del edificio principal, estos altorrelieves son el manifiesto del gran valor arquitectónico del inmueble que ha dado cobijo a muchas generaciones de maestros mexicanos colocándola como una de las mejores escuelas de educación normal en el país.
Los frontispicios de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros son parte del gran legado de la obra escultórica de Luis Ortiz Monasterio que sin duda hacen de este hermoso edificio un importante patrimonio cultural de nuestro país.
Si en algún momento tienen oportunidad, visiten este maravilloso recinto educativo que además de ser referente en la historia de la educación de México es una excelente opción educativa.