Desde la invención de la bombilla eléctrica por parte de Thomas Edison en el año 1880, la tecnología no ha hecho más que avanzar y crecer continuamente, uno de los factores clave que ha ayudado a la humanidad a progresar, ha sido la evolución y por supuesto, la competencia en el amplio mundo de la tecnología, desde automóviles, smartphones y hasta electrodomésticos, se han ido reinventando a lo largo de los años, sin embargo, el sector de las computadoras ha estado en boca de todos, no sólo por la construcción de las mismas, si no que los sistemas operativos, han representado el punto de quiebre para decidir el éxito o fracaso de cada compañía.
Surgió una idea, Microsoft
En el año de 1981, a las orillas del condado de Redmond en Estados Unidos, el mundo presenciaba el nacimiento de la que actualmente es una de las mayores empresas dedicadas al avance tecnológico en el mundo, Microsoft, el panorama era incierto, las primeras computadoras modernas, comenzaban a ver la luz y diversas empresas, analizaban la posibilidad de competir en este mercado, Microsoft adelantando a la competencia, se decidió a crear un sistema operativo estable y que a diferencia del que Apple fabricaría previamente, daría soporte a una mayor cantidad de dispositivos, dicho sistema, fue nombrado como MS-DOS.
Como era de esperarse, la competencia fue avanzando progresivamente a lo largo de los años, empresas que aparecían en el mercado, de pronto desaparecían, los sistemas operativos que nacían, al poco tiempo se tornaban inestables, tal es el caso de IMB que al lanzar su propio sistema en el año 1987, al poco tiempo comenzaba a presentar fallas, errores de compatibilidad, entre otros fallos, mientras esto pasaba, Microsoft continuaba con su expansión, una de sus principales características, era que se acoplaba fácilmente a la arquitectura informática, situación que al ganar popularidad, otras empresas comenzaron a aprovechar.
El retorno de un titán
No fue hasta el año 2001 que uno de los grandes de la tecnología, regresó al mercado, no sólo con un sistema operativo, sino que había logrado fabricar su propia computadora, por supuesto, Apple, la marca de la manzana se convirtió rápidamente en un referente para diversas empresas, esto gracias a que habían logrado establecer un estándar de exclusividad al posicionar a su computadora Macintosh, como un dispositivo centrado en personas que no solo pudieran pagar el precio, empero, que buscaran una opción diferente y con la cuál, pudieran distinguirse del resto de usuarios.
[Te podría interesar: ‘ViX, el reto de posicionarse en el mundo del streaming‘]
Steve Jobs, dirigente de Apple en ese entonces, se alzaba triunfante, pues creía que al posicionarse firmemente en el mercado, no habría competencia que le pudiera hacer frente, sin embargo, Bill Gates, fundador de Microsoft, tenía otros planes, pues tan sólo un par de meses después, Microsoft lanzó Windows XP, un sistema operativo que planeaba competir directamente con MacOS, no obstante, esto sólo era el principio de una larga batalla por la supremacía, pues la verdadera batalla, comenzaría tan sólo 6 años después.
Gates y Jobs, habían literalmente desaparecido a la competencia y después de años por demostrar qué compañía era la mejor, en el año 2007, Apple se levantó del piso y decidió lanzar el primer smartphone moderno, iPhone, este dispositivo, representaba una macro apuesta por competir en un mercado totalmente nuevo, por si fuera poco, la marca de la manzana, también había inventado su propio sistema operativo para smartphones únicamente de la marca propia, dicho sistema, fue bautizado como IOS.
Microsoft había decidido no competir contra Apple en el ámbito de los dispositivos móviles, sin embargo, decidió continuar perfeccionando Windows, para más tarde, adaptar su sistema a otro tipo de aparatos, desde televisiones, hasta reproductores de MP3, sin embargo, Apple seguía tomando la delantera en cuanto a innovación, gracias a que había decidido enfocarse en todos los productos que llevaban su firma.
Después de exactamente 3 años desde el lanzamiento de iPhone, Microsoft lanzó finalmente su primer sistema operativo para móviles, de la mano de LG, crearon lo que podría ser una propuesta fresca para los conocedores de la tecnología, el LG OPTIMUS 7 E900 se perfilaba para cambiar el mundo gracias a la alianza con los de Redmond, Windows Phone 7, era el nombre del novedoso sistema que implementaba funciones nunca antes vistas en un dispositivo móvil.
Después de notar que Windows Phone no era muy bien recibido por los usuarios y por la crítica, los de Redmond decidieron retirar del mercado todo rastro de su línea de smartphones y continuar innovando con Windows para computadoras, pues hoy en día, tenemos a la vuelta de la esquina el lanzamiento de la versión final de Windows 11, que tomando como referencia las anteriores versiones, incorpora funciones que todos dábamos por perdidas, desde el nuevo menú de inicio muy al estilo de Windows 7, hasta el rediseño del explorador de archivos que muchos deseaban.
Sin duda alguna, Microsoft ha sabido mantenerse en el mercado a pesar de gigantes como Google y Apple, sin embargo, una de las variables por las que el público sigue prefiriendo Windows, ha sido que la nostalgia sigue a flor de piel, actualmente, el saber analizar a la competencia e implementar soluciones distintas, se ha convertido en un factor clave al momento de sobre salir y nos queda claro que para Microsoft, el consumidor es primero.
