El Metro de la CDMX es uno de los sistemas de transporte que más se usa en la capital de nuestro país, cuenta con doce líneas, 195 estaciones y 226.49km de longitud de todas sus redes. En el año 2006 obtuvo el tercer lugar a nivel mundial por captación de usuarios, transportando 3.9 millones de pasajeros al día, en el mismo año estuvo en el quinto lugar a nivel mundial debido a la extensión de su red. Pero ¿acaso sabías la historia de su inauguración y la relación que tiene con La Doña, María Félix?
Un 4 de septiembre de 1969 se inauguró su primera línea, “la línea rosa”, y aunque el proyecto ya había sido propuesto por el ingeniero Bernardo Quintana Arrioja, Ernesto Uruchurtu, regente en ese entonces de la Ciudad de México, denegó la propuesta por distintas razones, entre ellas que México se encontraba sin relación con el Banco Mundial y no tenían la cantidad suficiente para poder llevar a cabo la obra, además opinaban que era un peligro para los ciudadanos por las malas condiciones del suelo y los terremotos que cada vez lo empeoraban más.
Quintana no se rindió e insistió con su idea en el sexenio del presidente Gustavo Díaz Ordaz, pero éste último tenía la misma inquietud sobre lo que costaría realizar el proyecto. Así que aprovechando las relaciones con el presidente de Francia, Charles de Gaulle, el banquero francés, que en ese entonces era esposo de María Félix, Alexander Berger y que además era amigo de Bernardo Quintana, hizo el papel de mediador entre ambos países para que que Francia apoyara con una parte de los gastos y así fue.
Aquí es donde viene la parte interesante, ya que María Félix en una ocasión comentó que la primer idea de crear el metro en México fue de su esposo, quien le dijo: “Tú que quieres tanto a tu México y que quieres que progrese, y eres tan farolona y te gusta lo fabuloso, ahí te va un regalo”. Añadió a esto: “Yo me reí cuando me lo dijo, pero Alex cuando prometía, cumplía”.
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María bonita quería que su país estuviera a la altura de grandes potencias, y orgullosa presumía que una de las primeras ideas llevadas a cabo para el progreso de México fuese un regalo y una prueba de amor hacia ella: “Si no me lo quieren creer, nada va a cambiar entre nosotros. Pero el maravilloso metro que tiene la Ciudad de México es mío, me lo regaló mi marido”.
Después de todos los planes, que incluso algunas de las reuniones para este proyecto tuvieron lugar en el hogar de La Doña, el 19 de junio de 1969 inició la construcción de lo que sería un paso para la modernización del país. Y como homenaje, la primer tirada de boletos fue fabricada en Francia. Incluso la relación diplomática entre ambos países mejoró a partir de este suceso.
Tal vez no le debemos del todo la creación del metro a nuestra María bonita, pero sí reconocer la gran influencia que tuvo, incluso en el año 2014 se recordó su participación cuando el Subsecretario del Sistema de Transporte Colectivo, José Alfonso Suárez, afirmó: “En efecto, el señor Berger, participó en el proceso de construcción de las primeras tres líneas. En efecto, en casa de María Félix se llevaron a cabo reuniones de trabajo…”
Ahora ya sabes un dato bastante curioso, que apuesto a que jamás se te hubiera ocurrido que tuviera relación: la urbanización de México y una actriz del cine de oro.
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Fotos portada: fuente / elpais.com y capital21.cdmx.gob.mx