Una noche me puse triste. Sin motivo ni razón quería llorar. La música sad siempre me ha ayudado a continuar con ese estado de ánimo donde puedo decidir la cantidad de lágrimas por derramar. Mi lista de Spotify no tenía las suficientes canciones para proseguir con la llorada nocturna, pues la noche se hizo para ser nostálgicos, recordar, mirar al cielo, pensar y repensar las situaciones acontecidas con el paso de los días. Así que decidí abrir YouTube y dejarme llevar por la corriente de videos infinitos de esa plataforma.
La triste revelación
En el feed, más o menos en el tercer peldaño, leí ‘Dormir sin coger’ de Arroba Nat. Ya había escuchado de aquella chica que cantaba rolitas tristes, así que me aventuré a reproducir el video y conocer a fondo su trabajo para poder estar triste a gusto. Comenzó la canción: Tus brazos son mi almohada / Yo me pierdo en tu mirada / Y me encanta amanecer a tu ladito otra vez / Y cuando no pienso en ti solo pienso en cómo voy a morir / Y cuando pienso en ti todo lo malo se va de mí / Quisiera saber si me quieres / Quisiera saber lo que ves cuando me ves.
Lo que sentimos
El impacto sobre mí fue inmediato. Con un timbre de voz suave, como si cualquier sonido, líquido o rayo de luz pudiese resbalar sin esfuerzo por su boca. Con un bit que no se pierde en toda la canción y mantiene al escucha atento. Y, lo mejor de todo, la letra. Un discurso poderoso que dice “estoy triste y lo expreso al mundo porque no está mal sentirse así, es parte de la vida, y el arte ayuda manifestarlo de mejor manera”. No tiene igual.
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Sus letras dicen tristeza, pero su voz dice felicidad. Es una dualidad que se compagina para darle sentido a las lágrimas de la penumbra que sólo es alumbrada por la luna y las estrellas que parpadean al mismo tiempo con la gente en sus camas, para tener el ritmo de las canciones de Arroba Nat. La canción continuó: ¿A caso es tan difícil darte cuenta que yo siempre estaré aquí? / ¿Por qué me haces pensar que tú me quieres igual? / ¿Por qué hablar de tu ex? / ¿Por qué dormir sin coger?
¿Quién nos hace llorar?
Llorar y ponerse triste cobró más sentido gracias a ella. Natalia Díaz, una chica de 21 años que estudió diseño integral, además de ilustrar, tuitear y vivir la vida al momento. También ríe y llora, porque es parte inherente del ser humano, pero la ventaja es que lo expresa en canciones que son adoptadas por personas, como yo, para estar en cama, bañarse, viajar en transporte público o hacer cualquier actividad, como recostarse en el pasto de cualquier parque y observar las nubes pasar lentamente.
Desde Zacatecas para todo México, Arroba Nat se inspira, triste y alegremente, de momentos amargos, pues así es la vida: agridulce, y lo demuestra sus canciones. El conjunto de sentimientos apachurra el corazón de quienes la escuchan y lo exprimen para que salgan más lágrimas mientras sonríen. Nos da pie a convivir con nuestra melancolía.
Lo más nuevo de Arroba Nat
Ya con varios años en la escena musical mexicana, Nat anunció el lanzamiento de su primer disco ‘Para echar la lloradita’. El 20 de abril de este año, en un concierto en el Foro del Tejedor, cantó algunas canciones de su primera producción de largo aliento.
Así, el 27 de septiembre, lanzó el disco que nos hizo y hará llorar a todos. Son nueve canciones que, segundo a segundo, te cuentan parte de la triste historia amorosa de Arroba Nat y nos transportan a nuestras propias experiencias a través de cada lágrima que tiramos al suelo.
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Natalia nos invita a estar sad, a llorar sin pena en cualquier lugar y a disfrutar la vida, de sus buenos y malos momentos. Arroba Nat comenzó a romperla en la escena del folk mexicano y lo seguirá haciendo por mucho tiempo más. Y ahora que pienso en ti todo lo malo regresa a mí / Y cuando pienso en ti solo pienso en cómo voy a morir / Y cuando pienso en ti todo lo malo regresa a mí / Y cuando pienso en ti solo pienso en cómo voy a morir / Y cuando pienso en ti todo lo malo regresa a mí.