Ciaran Foy, director de la segunda parte de ‘Sinister’, trae para nosotros ‘Eli’, una película bajo el sello de Netflix.
Parece que el terror es el fuerte del director, puesto que la secuela de ‘Sinister’ tuvo una excelente respuesta por parte de la audiencia, y con ‘Eli’ no fue la excepción, la cinta resulta ser más buena de lo esperado.
La película cuenta la historia de un niño de diez años llamado Eli, quien vive con una extraña enfermedad y se ve obligado a llevar puesto un traje y vivir prácticamente aislado de todo y de todos. El agua, el polvo y hasta el aire le afectan.
Eli vive en una gran carpa de plástico, y cuando sale, usa un traje azul de materiales peligrosos para que no entre en contacto con el aire y su salud no empeore. Por si fuera poco, el niño tiene una pesadilla recurrente: que su cuerpo empieza a quemarse y a arder de la nada.
En un último intento de curarlo, sus padres deciden llevarlo a una clínica en un lugar remoto, donde lo someten a una terapia experimental. No es esa una clínica tradicional, sino una antigua casona en medio de la nada, a cargo de la doctora Isabella Horn (Lili Taylor), quien promete mejorarlo. Eli es el único paciente.
La cinta tiene un increíble giro de tuerca, ya que en primera instancia nos presenta lo que podría ser otra película donde un poltergeist en un hospital es el causante de todas las situaciones de estrés; sin embargo, nos daremos cuenta con el excelente desarrollo de la cinta, que todo tiene un fondo totalmente distinto.
Una de las grandes fortalezas de la película es que no tiene incongruencias, todo lo contrario, se encargan de desarrollar la historia paso a paso para que el espectador siga atento a lo que sucede en la historia, que gracias al guión de David Chirchirillo, Ian Goldberg y Richard Naing es bastante digerible.
[Te podría interesar: ‘5 sagas de películas que debes ver si amas el terror‘]
Cuando el primer nudo en la cinta se ve resuelto encontraremos que Eli es mas que un niño enfermo, lo que converge en el giro principal de la trama, y al mismo tiempo, nos da el clímax de la historia.
Para este momento la película hace un excelente uso de efectos especiales, que no caen en lo ridículo y funcionan en el momento exacto, la forma en la que el director aborda un argumento de un par de cintas vintage de terror, resulta muy funcional.
Sin duda alguna esta producción de Netflix se suma a la larga lista de aciertos por parte de la plataforma de streaming.
Disfruten esta nueva joya del terror y vean otra perspectiva sobre las profecías del anticristo.