Todos hemos escuchado hablar del realismo mágico y su peculiaridad: saltando a través del tiempo, sin apenas darnos cuenta mientras leemos una historia. Y es claro que conocemos este tipo de narrativa gracias al colombiano ganador del Premio Nobel de Literatura en 1982: Gabriel García Márquez. Sin embargo, poco se nombra a la escritora mexicana de quien se dice que fue la pionera de esta narrativa: Elena Garro.
Tal vez has escuchado su nombre con anterioridad, ya que la historia nos la ha presentado más como la primera esposa del poeta mexicano Octavio Paz (quien también ganó un Pemio Nobel de Literatura en 1990), dejando de lado su propio trabajo y obras. Pero debes saber que Elena fue poetisa, dramaturga, periodista, cuentista y narradora, y usó esta técnica en su primera novela ‘Los recuerdos del porvenir’ (1963), donde narra la historia de dos hermanos durante la Guerra Cristera, en Ixtepec; una comunidad imaginaria de Iguala, lo curioso es que todo el relato lo cuenta el mismo pueblo.
Ésta es su novela más reconocida e incluso fue galardonada el mismo año con el Premio Xavier Villaurrutia. Es una obra que refleja los ideales políticos y sociales de la escritora, ya que cuando era pequeña le tocó vivir la Revolución Mexicana, y apoyaba la idea de que los campesinos pudieran poseer sus propias tierras. Asimismo aborda el tema de la liberación de la mujer. Otro dato curioso acerca de esta novela es que incluso fue llevada al cine por Arturo Ripstein, en 1968.
Elena nunca creyó que tuviera tanto éxito, se negaba a escribir porque creía que era una idea absurda, pero recordando palabras de su padre, concluyó que en su casa todos debían ser escritores. En 1953 fue cuando llegó la inspiración y comenzó a escribirla, después de haberla terminado la dejó abandonada en un baúl, años después cuando la volvió a encontrar decidió quemarla, sin embargo su hija Helena Paz la rescató del fuego y a Octavio Paz le encantó, así que fue gracias a él que se logró publicar.
Y aunque muchos creen que García Márquez fue quien comenzó a hacer uso del realismo mágico, él no publicó su gran Best Seller “Cien años de soledad” hasta 1967, cuatro años después que Elena Garro publicara su primer novela. La diferencia es que él tuvo más éxito y trascendencia que la escritora mexicana, ya que a pesar de haber transcurrido tantos años, y aunque algunos no hayan leído la novela, todos conocemos y ubicamos quién fue García Márquez, sin embargo, no reconocemos a Elena Garro si el nombre no está junto al de Octavio Paz.
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Lo curioso del caso, es que a Elena jamás le gustó que la creyeran o le llamaran la pionera del realismo mágico. Patricia Rosas Lopátegui, la autora de la única biografía que existe de Garro, explicaba que le desagradaba que se le dieran los créditos, creía que el realismo mágico era sólo una herramienta para vender más libros en aquella época.
También existe un rumor el cual dice que Gabriel García Márquez se inspiró en “Los recuerdos del porvenir” para poder escribir “Cien años de soledad”. No se sabe con exactitud qué fue lo que sucedió o quién fue el precursor, lo único que no debemos olvidar es darle créditos y reconocimiento a aquellos escritores que fueron los primeros (aunque no los únicos) en usar el realismo mágico en sus obras.
Y por si te preguntabas qué otros autores trabajaron con este recurso, aquí te dejo el nombre de algunos, en caso de que quieras introducirte a mundos un tanto fantásticos y perderte en aquellas maneras no lineales de escribir: Isabel Allende, Juan Rulfo, Horacio Quiroga, Miguel Ángel Asturias.
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Foto portada: fuente/vertigopolitico.com
