El mundo de la literatura es maravilloso tanto para quien escribe como para quien lee, a través de las letras el hombre es capaz de vaciar su conciencia creando escritos que logran trascender las barreras del tiempo y el espacio, cuentos, novelas, ensayos, poesía son algunas de las formas en las que se manifiesta no solo la creatividad y el conocimiento, si no también, lo que hay en lo profundo de la psique humana.
Escribir es un ejercicio en el que se involucran gran parte de nuestros sentimientos, pues revela casi todo aquello en lo que creemos, pensamos o soñamos, gracias a la escritura hemos tenido el privilegio de deleitarnos con grandes creaciones literarias que nos transportan a mundos imaginarios de los que muchas veces nos vemos como protagonistas, pero ¿Qué sucede cuando lo que escribimos o leemos en lugar de llevarnos a un mundo utópico nos conduce a uno catastrófico?
El escritor Howard Phillips Lovecraft, mejor conocido como H.P. Lovecraft, nació en Providence, Estados Unidos, el 20 de agosto de 1890 y murió en Ibídem el 15 de marzo de 1937. Es autor de novelas de terror y ciencia ficción, su línea narrativa fue más allá de las tradicionales historias, pues en sus obras incluía elementos como razas alienígenas, viajes en el tiempo o la probable existencia de otras dimensiones.
Partiendo de esto, Lovecraft escribió uno de los libros más terroríficos de la historia, ‘Necronomicón’ también conocido como “el Libro de los Muertos” o “el Libro de los Nombres Muertos”, el cual es un grimorio que forma parte del universo de ‘Los Mitos de Cthulhu’.
Gracias a su increíble talento e imaginación H.P. Lovecraft logró engendrar una historia de terror capaz de convencer a muchos lectores de que la narración fue tomada de un episodio de la vida real.
El impacto que generó Lovecraft con Necronomicón fue tan poderoso que muchos lectores comenzaron a especular sobre la existencia de este grimorio, incluso, hay quienes afirman que el escritor tuvo acceso a un texto esotérico antiguo llamado Kitab Al-Azif (rumor nocturno), de origen árabe, escrito por Abdul Alhazred alrededor del año 730.
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El contenido del libro es una serie de invocaciones, cantos en islam que asemejan los murmullos de los demonios, los cuales sirven para despertar a Dioses de la oscuridad y abrir puertas dimensionales que les ayudarían a regresar a nuestro mundo del que fueron desterrados hace miles de años como es el caso del Gran Cthulhu. El poder de estas plegarias es tan grande que basta leerlas para traer al plano terrenal demonios y seres sobrenaturales capaces de provocar inimaginables horrores.
El grimorio incluye nombres de entes, sellos y rituales para la invocación, empastado con piel humana, escrito con sangre sobre hojas de pergamino. Necronomicón es un libro maldito, tremendamente poderoso y peligroso, la persona que averiguara como usar el Necronomicón podría acabar con la existencia humana.
La descripción de todos los datos fue muy exacta, la combinación de lugares reales y ficticios que Lovecraft utilizó en su narración hicieron parecer que la historia es completamente verosímil logrando confundir y dividir al público lector, a esto se le suma la leyenda urbana que dice que quienes creyeron verdadera la historia y se atrevieron a invocar alguna entidad sobrenatural tuvieron un final aterrador.
Lovecraft siempre aseguró que toda la historia es ficticia y los datos reales incluidos en ella solo fueron para adentrar a los lectores en la narrativa, por varios años recibió cartas de lectores interesados en conocer más sobre Necronomicón a los que respondía que él disfrutaba inventando historias míticas con personajes oscuros.
Sin duda el gran talento que convirtió a Lovecraft en uno de los escritores más leídos y reconocidos en el género del terror se manifiesta en la transcendencia de su obra, hasta la fecha hay quienes buscan el Necronomicón como si fuera real, aficionados a la obra han creado fichas del libro en diferentes bibliotecas incluso se dice que el propio José Luis Borges introdujo una ficha falsa en la Biblioteca Nacional de Argentina.
H.P. Lovecraft fue un genio de la narrativa, precursor del terror moderno que utilizó su vasto conocimiento, cultura e ingenio para lograr hacer de sus escritos grandes obras literarias con la capacidad de llevar al lector a la sugestión, entrar en su mente para provocar discordancia entre lo real y lo imaginario, es así que el maestro del terror y su libro maldito son la prueba de que saber usar las letras puede llevarte a la inmortalidad sin necesidad de invocar a ningún Dios del inframundo.
