Recientemente te hablamos sobre el turismo negro, que implica un interés por visitar lugares macabros. Más allá de ser destinos que atraigan a las personas, los siguientes lugares tienen una atmósfera siniestra. Ya sea que su infamia provenga de mitos y leyendas, de misterios no resueltos o del lado más crudo de la realidad, la aberración generada por estos lugares es intolerable.
1. Cementerio colgante en la Isla Luzón, Filipinas
Como parte de un ritual que tiene, aparentemente, más de 2000 años de existencia, las personas del pueblo igorote en Filipinas colocan a sus difuntos en sarcófagos colgantes. Los ataúdes de madera están hechos a mano y se tiene la creencia de que al suspenderlos sobre el suelo, en pleno acantilado, se ayuda a los difuntos a acercarse al cielo y a sus antepasados.
Además de esta creencia, el hecho de colgar los ataúdes con los restos de los difuntos los mantiene seguros. Esta actividad previene situaciones como que, durante la descomposición del cuerpo, algún animal o persona ajena a la localidad pueda encontrar el cadáver y tener fácil acceso a él.
2. Iglesia de San Jorge de Lukova, República Checa
Aquí los vivos acuden a misa junto con los muertos. Este complejo religioso fue abandonado en 1968, ya que durante un funeral parte del techo comenzó a desprenderse. Los habitantes de la región consideraron esto como un mal augurio, así que no volvieron. La construcción permaneció olvidada hasta 2014, año en el cual Jakuv Hadrava decidió utilizar el recinto como parte de un proyecto escolar para el Departamento de Diseño y Bellas Artes de la Universidad de Bohemia Occidental.
Hadrava construyó una serie de figuras fantasmales, de tamaño real, y las vistió con túnicas para distribuirlas por todo el espacio del templo. Su idea era homenajear las almas de los felgireses alemanes que fueron expulsados después de la Segunda Guerra. Estas esculturas mantienen las almas de los difuntos en una ceremonia perpetua.
3. Isla Migingo
Los habitantes de esta pequeña porción de mundo soportan el extremo hacinamiento, la pestilencia del pescado del Lago Victoria y la proliferación de infecciones de transmisión sexual. Por si fuera poco, en esta localidad la amenaza de enfrentamiento bélico es casi permanente debido a conflictos políticos, pues tanto Kenia como Uganda buscan reclamar la isla como parte de sus respectivos territorios.
4. Cementerio de Chauchilla, Perú
Este conjunto de fosas prehispánicas exhibe, al aire libre y como obras de arte, los despojos humanos de sus huéspedes. Algunos esqueletos siguen aferrados a la ropa y el cabello que lucían en vida.
5. Agbogbloshie, Ghana
Es el vertedero de chatarra electrónica por excelencia. Sustancias como cadmio, plomo y antimonio son liberadas por la quema y el mal manejo de los desechos. La brutal toxicidad desgasta los pulmones de los trabajadores incluso hasta el punto de ocasionarles cáncer.
6. Bosque Aokigahara, Monte Fuji, Japón
La fama de este bosque no se debe a su vegetación, sino a la fauna de cadáveres humanos que durante décadas han sido encontrados. La densidad de árboles facilita que cualquier persona se pierda y se quite la vida sin que haya testigos. Ahorcamiento, ingesta de venenos y sobredosis de drogas son los métodos predilectos.
