La expectativa levantada por Assassin’s Creed Valhalla es muy alta, en primer lugar por presentar un contexto bastante popular en videojuegos, series y películas como son los vikingos y toda su mitología y en segunda por tratarse del título que prácticamente estrena la nueva generación de consolas.
Veamos en esta reseña si el juego más reciente de la franquicia más importante de Ubisoft logra la eternidad en el Valhalla o si pasará tan solo al olvido.
¿De qué se trata?
Eivor, quien tú puedes elegir si es hombre o mujer o dejar que el juego lo decida por ti de forma alternada, es un vikingo del Siglo IX, quien después de negarse a doblar la rodilla ante un rey ajeno, se embarca a lado de su hermano Sigurd en la búsqueda de un hogar para su clan. Para lograrlo tendrán que viajar desde Noruega hasta Inglaterra, conquistar territorios y hacer crecer su campamento hasta formar un gran imperio.
Una sombra asecha a nuestro protagonista, pues ha sido profetizado que traicionará a sus seres más queridos y traerá la tragedia a sus cofrades y gran parte de la historia tratará de él buscando la forma de no cumplir el destino que le ha sido anunciado.
Parte de los aliados que tendrá Eivor y El Clan del Cuervo, nombre de sus camaradas vikingos incluye a un par de miembros de la Orden de los Asesinos, o de los Ocultos, quienes trazan una amistad con los vikingos al mismo tiempo que buscan destruir la influencia de su grupo rival que tienen ahorcada a toda Inglaterra con sus complots, evidentemente hablamos de la Orden de los Templarios o de los Antiguos como gustan llamarle hoy en día en la franquicia.
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A la par, tendremos una historia en la “época actual” en donde haremos uso de nueva cuenta de Layla Hassan, la protagonista de esta trilogía que nos fuera presentada en Assassin’s Creed Origins y que en esta ocasión tiene un arco más extenso y mejor desarrollado y cuyo objetivo parece más relevante, pues busca como Desmond en su tiempo, y tendrá a su lado a los asesinos actuales y ya conocidos de la serie, Shaun y Rebecca.
¿Cómo se juega?
Assassin’s Creed Valhalla aprovecha la herencia tanto de Origins como de Odyssey para entregarnos un juego de mundo abierto con toques de RPG en el cual haremos uso de nuestro personaje en tercera persona, al mismo tiempo que nos enfrentamos a misiones de combate y sigilo.
En lo referente a los elementos de RPG, ahora en vez de subir de nivel y esperar a tener el número para enfrentar a enemigos más poderosos, cada área y misión están disponibles desde el inicio y se limita a sugerir un nivel de poder.
Tus decisiones cobran importancia que se puede palpar a través del juego ya que dependiendo de ellas puedes cambiar el transcurso de las diferentes tramas, ver morir a personajes e incluso cambiar la percepción que tus aliados tienen de ti.
Cuentas con un árbol de habilidades que te invita a perfeccionarte capacidades de sigilo, cuerpo a cuerpo y distancia, pero la adición principal a este sistema es que es altamente flexible e interconectado.
Otro de los aspectos destacados es que a diferencia de los dos juegos anteriores, tienes menos loot en cuanto a armas y ropa, y la principal forma de subir de nivel es agregándole runas que mejoran su resistencia o ataque.
El juego presenta tres dificultades para tres aspectos distintos, para el combate, para el sigilo y para la exploración. Incluso seleccionando la dificultad más baja para descubrir lugares y armas poderosas, te enfrentarás a un buen reto que te hará poner atención a notas, escritos y elementos regados por su inmenso mapa.
Lo que te va a gustar
Assassin’s Creed Valhalla presenta algunas de las cosas favoritas de los seguidores que ya se extrañaban, en primer lugar nos da una historia más concisa de la época actual con un objetivo claro y que además viene a cerrar algunas cosas que quedaron sueltas a lo largo de la franquicia.
Hay más elementos de conspiración, teorías del fin del mundo y hasta jugabilidad con Layla que hacen sentir a este título más parecido a lo que vimos con la trilogía de Desmond Miles en vez de meras anécdotas sueltas de gente que se metía casualmente al Animus como pasó en todas las entregas desde ACIII hasta Odyssey.
Otro elemento interesante a vivir en el título es la enseñanza de los Asesinos hacia nuestro protagonista, sirven de forma perfecta para recordar a la orden que le da nombre a este juego y también si eres nuevo en la serie, te puedas ir familiarizando con cosas tan esenciales como el salto de fe, la hoja oculta, los burós de los Asesinos y más.
En lo que se refiere a la jugabilidad, el combate es un deleite, Eivor puede hacer uso de una gran variedad de armas a una o dos manos, ya sea con hachas, lanzas o mazos unidos a una cadena, lo cual lo vuelve un aspecto fluido y diverso y además cuenta con ejecuciones muy vistosas y un sistema donde puedes encontrar los puntos débiles de los enemigos para enfrentamientos más estratégicos.
Por otra parte el tamaño del mundo y los elementos a explorar también son una maravilla y los diferentes ambientes y fauna que encontraremos harán las delicias para los jugadores, sin mencionar el increíble apartado gráfico del juego que incluso en la generación pasada de consolas luce espectacular y se explota al máximo en la next-gen.
También cuenta con un diseño sonoro exquisito y que no solo se presenta en las cinemáticas, si no que acompaña de forma dinámica al juego cuando realizas un saqueo o entras a un combate.
Lo que no te va a gustar
Si bien la historia es intrigante y oscura, tarda mucho tiempo en despegar, se estima que la campaña dura unas 70 horas llevándotela con calma, pero no será hasta que hayas pasado unas 10 horas jugando que se pone realmente interesante.
Eivor es un buen personaje, bien escrito y diseñado, sostiene bien la historia, pero el problema principal radica en que durante gran parte del juego su objetivo está demasiado diluido, empieza siendo la venganza, y muy rápido pasa a ser el encontrar un hogar para él y sus amigos, no es sino hasta ya avanzado el juego que descubres que lo que realmente busca es huir de su destino, pero eso provoca que en un mundo tan grande te sientas con un objetivo bastante débil.
La historia está contada a forma de episodios, te embarcas en arcos narrativos que te pueden llevar de dos a tres horas y una vez terminados difícilmente los personajes vuelven a tener relevancia, lo que lo hace sentir más como una serie y aunque se agradece el esfuerzo de Ubisoft por salirse de lo tradicional, esto muchas veces tiene resultados inconsistentes, hay buenas historias y otras bastante planas, con personajes superficiales, que en general te hacen sentir sin rumbo y sin una oposición clara.
¿Vale la pena?
Assassin’s Creed Valhalla es sin duda un título a disfrutar, sin importar cuál sea la generación de consolas que tengas, le va a sacar el máximo provecho a todas y te ofrecerá una cantidad de contenido impresionante que además cuenta con mini juegos de tomar cerveza, poesía vikinga, dados, misiones contra enemigos mitológicos y más.
Claro que Valhalla tiene sus fallas, sobre todo en narrativa y en ritmo, pero aún así se agradece la voluntad del equipo de mostrar algo distinto que pudo cuajar o no, pero se tomó el riesgo y eso es de admirarse. También cuenta con algunos bugs que se han reportado y fallas en rendimiento, que se pueden arreglar con updates.
Es un título perfecto para aquellos que extrañaban el “lore” de los Asesinos tanto en el pasado como en la época actual, y su representación de la época vikinga y la Edad Oscura lo hace también un juego que se mantiene por sí mismo y fácilmente puede enganchar a cualquiera que apenas quiera estrenar su consola con un título AAA en toda la extensión de la palabra.
Por todo lo anterior, le otorgamos a Assassin’s Creed Valhalla un “mencorazona” título con el que calificamos a esos juegos que van de buenos a muy buenos.
Título: Assassin’s Creed Valhalla
Desarrolla: Ubisoft
Género: Acción Aventura/Mundo abierto
Plataformas: PS4, Xbox One, PS5, XSX, PC
Estreno: 10 de noviembre 2020
