A principios del 2018, en compañía de amigos hice un viaje al Nevado de Toluca, quise vivir la experiencia de subir hasta la cima de uno de los volcanes inactivos más famosos de México.
Así que tome mi cámara; decidí aventurarme a conocer y capturar la experiencia, quería tener unas fotos como las que circulaban en Instagram y Facebook de personas que habían visitado el lugar.
Mi motivación principal era llegar hasta la laguna y tomarme una foto allí, así que era necesario llegar a la cima.
Realizar un viaje al Nevado de Toluca tiene un costo accesible tomando en cuenta que viajas desde un estado de la República cercano, así que para vivir la experiencia recomiendo que busques alguno de esos tours que ofrecen agencias de viaje donde el costo oscila de entre $500 a $1500 el cual puede variar dependiendo de donde viajes.
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Con mis amigos pagamos unos de esos tours, la primera parada fue el Parque de los Venados, allí llegan la mayoría de los visitantes tanto los que viajan en grupo como nosotros, como los que viajan en auto propio, dicho lugar ofrece servicio de restaurante y de sanitarios razón por la cual, muchos aprovechan a comer algo antes de comenzar a subir para llegar a las faldas del volcán.
Muchos aventureros y amantes del senderismo prefieren tomar su propia ruta y no seguir la ruta establecida, yo recomiendo que sigas la ruta que está marcada para los turistas y visitantes, para evitar tener problemas durante el camino, puesto que dicha ruta aunque es un camino de terracería, esta visible y despejado por lo cual es difícil perderse.
En nuestro caso rentamos un servicio de transporte que se ofrece en el Parque de los Venados, dicho servicio te traslada desde ese punto, hasta la entrada del Parque del Nevado de Toluca así ahorras el tiempo que te llevaría llegar hasta allí, que es aproximadamente de 2 a 3 horas. Hay que tomar en cuenta que el Parque del Nevado abre a las 9:00 am y cierra a las 3:00 pm.
Es recomendable que antes de subir, el cuerpo se haya mantenido hidratado y haber comido bien, vestir con ropa y zapatos cómodos y adecuados para el terreno irregular y el clima frío del lugar, ya que hay que caminar a cuestas en un terreno pedregoso y por supuesto que la altura puede ser un factor para que tu aventura no sea tan placentera.
En la entrada del Parque hay un mirador donde puedes apreciar una bonita vista de Toluca y parte del Estado de México, esa es la segunda parada para muchos, allí se puede descansar un poco antes de comenzar a subir.
La verdadera travesía inicia cuando comienzas a subir, en mi caso era la primera vez que subía tan alto, así que mi cuerpo no estaba preparado del todo, me costaba respirar, mi corazón empezó a latir rápidamente y mis oídos me dolían, no sé cuántas personas hayan experimentado eso mientras subían, es importante caminar lento y mantener constante la respiración para evitar malestares por la altura y así poder disfrutar del ascenso.
Aproximadamente son 40 minutos los que lleva subir desde el mirador hasta el cráter, desde mi experiencia personal estaba a punto de abandonar la travesía pero había visto que lo más hermoso que ofrece el Nevado de Toluca son sus lagunas, la del Sol y la Luna, así que tenía que llegar hasta el final y ver con mis propios ojos esa maravilla natural.
Cuando éstas en la cima y has llegado al cráter los 4,558 metros de altura sobre el nivel del mar a los que te encuentras son irrelevantes cuando puedes ver lo que hay dentro del cráter, las lagunas son lo más bello que los ojos del viajero pueden ver.
Hay dos caminos que te conducen desde arriba hasta las lagunas, para llegar a la Laguna del Sol tienes que descender aproximadamente 10 min, una vez que has llegado a la Laguna te das cuenta que todo el esfuerzo ha valido la pena, muchos observan el paisaje atónitos de tanta belleza natural, otros juegan con el agua que es de color azul cristalino y muchos más aprovechan para tomarse la foto para Instagram o Facebook donde se presume el éxito de la travesía.
La aventura consiste en subir hasta el cráter, descender hasta las lagunas, volver a subir a la punta del cráter, y bajar hasta la entrada del parque, una vez allí se ha concluido con el viaje.
Realmente es una experiencia que vale la pena vivir, desde mi experiencia personal aprendí y disfrute durante este viaje, fue una aventura de soportar el clima frío, caminar mucho, de mucho esfuerzo y cansancio, de muchas fotos y sobre todo de darme cuenta que la naturaleza siempre nos va a sorprender con sus hermosos lugares.
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Foto portada: fuente / tipsparatuviaje.com