*** El siguiente artículo contiene spoilers de ‘The Last of Us Part II’ ***
‘The Last of Us Part II’ es un videojuego que estuve esperando con ansias desde que fue anunciado en 2016. La primer entrega simplemente me impresionó; a pesar de que la temática de una pandemia zombie no es nada nuevo, lograron crear una gran historia acompañada de una narrativa que te mantiene interesado en todo momento, la cual además nos presenta un final con un dilema moral que te deja un sabor agridulce. Esto acompañado de un gameplay fresco para la época: una especie de híbrido de survival horror con shooter en tercera persona hicieron que The Last of Us estuviera en boca de todos.
A pesar de que el final de The Last of Us puede considerarse como un gran cierre para la historia, estoy seguro de que no fui el único que se quedó con ganas de saber cómo continuaría la historia de Ellie y Joel. Sin embargo, jamás me habría imaginado que un videojuego tan esperado se terminaría convirtiendo en uno de los más odiados de los últimos tiempos.
Todo comenzó un par de meses antes del lanzamiento del juego. Hubo filtraciones de algunas cinemáticas del juego, las cuales, según los múltiples rumores que comenzaron a correr por internet, eran del final del juego. Yo nunca he tenido problemas con los “spoilers”, por lo que a pesar de que era un juego que esperaba mucho me aventuré a verlas.
Me encontré con la escena en donde muere Joel, el protagonista del primer juego, a manos de Abby, la co protagonista de la secuela. Me pareció sorprendente la brutalidad de la escena, pero la muerte de Joel era algo que me parecía necesario para que la historia de la secuela fuera tan buena como la del primer juego. Sin embargo, a mucha gente no le pareció tan buena idea.
A partir de ahí, el odio por The Last of Us Part II creció exponencialmente. Me volví prácticamente adicto a ver los comentarios en cada post de The Last of Us Part II que aparecía en mis redes sociales, un poco por morbo, y otro poco porque quería entender que hacía que un juego generara tanto odio entre la comunidad gamer.
Después de dos retrasos, la segunda entrega de The Last of Us por fin salió a la venta el pasado 19 de junio y era un juego odiado incluso antes de su lanzamiento; las razones eran muchas y traté de enterarme de la mayoría con el propósito de poder jugar al juego con un ojo crítico, atento a todas estas fallas que la gente tanto comentaba; ya que al ser un fanático total de la saga y de Naughty Dog, me daba miedo ignorar estos supuestos errores y tener un juicio sesgado.
Una de las mayores quejas, como ya había mencionado, fue la muerte de Joel. Primeramente me sorprendió que esta escena tuviera lugar en las primeras 2 horas del juego y no se tratara del final como me habían hecho creer las filtraciones. Mucha gente opina que la muerte de Joel es «una total falta de respeto» al personaje, argumentando que en el primer juego nos presentan a este personaje como un tipo sumamente cauteloso, capaz de detectar una emboscada y de abatir a un pequeño ejército él solo haciendo uso del sigilo y de su increíble habilidad con sus armas y herramientas que él mismo fabricaba; mientras que en The Last of Us Part II es sorprendido por Abby y su grupo “muy fácilmente”.
Si nos ponemos tan estrictos con la historia y el personaje, tendríamos que considerar también que Joel ya no es el mismo que conocimos en el primer juego. Se nos presenta en la primer entrega como un personaje despiadado, capaz de hacer lo que sea por conseguir lo que quiere, que es justamente lo que ocurre al final cuando extermina a la mayoría de los Fireflies para rescatar a Ellie, a quien para este punto ya veía como su hija. The Last of Us Part II tiene lugar 4 años después de los eventos del primer juego; 4 años en los que Joel dejó de preocuparse por sobrevivir, 4 años en los que decidió dejar de ser lo que era para convertirse en el padre de Ellie.
Me parece que la gente puso en un pedestal muy alto a Joel. Sí, es un gran personaje con una gran historia, pero es importante entender también que su muerte fue consecuencia de sus actos; actos que para muchos están justificados simplemente por ser el héroe de la historia. Sin embargo creo que muchos pasaron por alto que el juego intenta plasmar justamente esto: la relatividad del bien y del mal, y como todos creen tener la razón y el derecho de tomar vidas por defender sus ideales y a las personas que aman.
La segunda queja más recurrente con la que me encontré fue que supuestamente el juego responde a una agenda LGBT+, por lo que hay una inclusión forzada y busca ser políticamente correcto. Me parece triste que exista odio hacia el movimiento LGBT+ en una comunidad tan joven como la gamer, no obstante, esta temática está lejos de ser la central de la historia y apenas hay algunas menciones, me pareció que lo implementaron de forma natural y no afecta en nada a la narrativa.
El aspecto más notable es la orientación sexual de Ellie, que por cierto ya se sabía desde el primer juego, específicamente en el DLC Left Behind, por lo que no fue ninguna sorpresa. La segunda y la más absurda a mi parecer fue con respecto a Abby, quien es una mujer con una complexión bastante musculosa, por lo que muchos dedujeron que se trataba de una persona transexual (y aunque así lo fuera no encuentro el problema), sin embargo, si juegas el juego, sabrás que el único personaje transgénero es Lev. Por lo que llegué a la conclusión de que el odio hacia Abby fue más bien porque ella fue la que asesinó a Joel.
Finalmente, las quejas que más llamaron mi atención fueron las referentes con la historia, me encontré con demasiadas personas que aseguraban que tenía un “guión flojo” y estaba repleto de “hoyos argumentales”. Por lo que me puse estricto con el juego, estuve atento en todo momento para tratar de encontrar alguno de estos hoyos o elementos absurdos que dañaran la historia, pero no pude encontrar ninguno.
Al contrario, me pareció una historia brillante. Lo que más disfruté fue todo este planteamiento de las diferentes perspectivas e ideales que están en una lucha constante durante todo el juego. La primera y más evidente fue el enfrentamiento entre Ellie y Abby, quienes están en busca de venganza por la muerte de un ser querido. Obviamente todos estamos de lado de Ellie en esa búsqueda de venganza, pero durante la segunda mitad del juego se nos presenta la perspectiva de Abby y entendemos por qué asesinó a Joel de esa manera tan brutal, por lo que nos ponen frente a otro dilema moral: ambas tienen razón, ambas tienen derecho a cobrar venganza.
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El segundo conflicto presente en todo momento pero que es un poco más difícil de percibir es el de Ellie con ella misma. Ellie busca venganza primeramente porque es lo que Joel habría hecho por ella, convirtiéndolo en una responsabilidad; sin embargo, a lo largo del juego se nos dan pequeñas señales que nos dejan ver que en realidad es difícil para ella tener que asesinar a toda esa gente.
Y esto se puede ver mas claramente al final del juego, que también fue fuertemente criticado, cuando Ellie decide perdonar a Abby y dejarla ir con Lev. Tal parece que la gente quería una venganza brutal contra Abby, pero lo que están dejando de lado es que justamente esta lucha interna que tiene Ellie durante todo el juego concluye cuando decide perdonar a Abby; probablemente porque le pareció que ya había sufrido suficiente, probablemente porque se dió cuenta que asesinarla no la ayudaría a deshacerse de la culpa.
Tal y como dijo Troy Baker, el actor de voz encargado de darle vida a Joel, cuando le preguntaron sobre cuál creía que era el mensaje del juego: “Es el ciclo de la violencia, para mi esa es la base del juego, por lo que mientras juegas, no mientras escuchas o hablas sobre el juego, sino mientras lo juegas te vas dando cuenta que esa obsesión te terminará costando todo…”