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El Marqués de Sade, ¿erótico, perverso o siniestro?

Donatien Alphonse François de Sade, mejor conocido como Marqués de Sade, fue un filósofo y escritor francés. Nació en París un 2 de junio de 1740 y murió en Charenton-Saint-Maurice, Val-de-Marne, el 2 de diciembre de 1814. Miembro de una de las familias de más antigua nobleza, fue un destacado héroe militar de Francia, a los 16 años participó en su primera batalla comandando cuatro compañías de fusileros durante la toma de Mahón (Menorca) a los ingleses, en el contexto de la guerra de los siete años, alcanzó el grado de capitán de caballería de Borgoña.

Señalado como transgresor de la moral y ateo radicalista, el Marqués de Sade fue un hombre amante de los placeres de la carne, los vicios y el libertinaje, encarcelado en varias ocasiones por faltas a la moral y por sus controvertidos escritos llenos de humor corrosivo y desestabilizador.

Su afición por la escritura surgió durante sus largos encierros en prisión, incursionó en todos los géneros literarios, novela, ensayo, poesía y teatro, sus grandes obras literarias muestran la zona gris del alma humana, aquella que todos poseemos, pero la mayoría reprimimos, la bestia que vive dentro de nosotros y que emerge de vez en cuando mostrando nuestro lado más violento.

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Los escritos del Marqués de Sade causaron indignación en la aristocracia y burguesía francesa que moralmente no tenía ninguna autoridad para reprocharle pues durante esa época el lema de ese estrato social era “placer a cualquier precio”, incluso el rey Luis XV había edificado burdeles privados y contaba con un gabinete dedicado a organizar las orgías para el monarca.

El Marqués de Sade gustaba de prácticas sexuales en donde el control total sobre el cuerpo y la mente de sus amantes era su principal afrodisíaco el “sadismo” palabra que deriva de su nombre, esta parafilia implica sentir satisfacción sexual ante el hecho de humillar, ejercer dominación y tortura a otra persona de forma no simulada.

«Mátame o acéptame tal y como soy, porque jamás cambiaré»
Marqués de Sade

Cada uno de los libros que escribió retrata las más perversas pasiones de su alma, para algunos resultan eróticas y para otros no son más que el reflejo de una mente retorcida y siniestra que gozaba con infringir dolor a su prójimo, lo cierto es que la retórica del Marqués de Sade es inusual y atrevida, logro perturbar las mentes de una sociedad que lo condeno al exilio y le arrebato su libertad de expresión culpándolo de hacer apología del crimen y el horror.

Con el tiempo y el cambio de pensamiento de la sociedad la censura terminó, la obra del Marqués de Sade logró ver la luz inspirando a otra generación de autores que reivindicaron su nombre y legado literario reclamándolo como precursor del surrealismo logrando asimilar su filosofía.

“Dejarnos llevar sin resistencia por la naturaleza de nuestro ser, darnos indiscriminadamente a todo lo que sugieren nuestras pasiones, y siempre seremos felices, la conciencia no es la voz de la naturaleza, sino sólo la voz de los prejuicios”.

De esta forma, demostraron que al contrario de lo que muchos expresaron de su obra los textos del Marqués de Sade no están orientados en su totalidad al erotismo, si se analizan y logran comprender entre líneas, sus escritos son una crítica a la modernidad que comparándola con la realidad contemporánea podemos darnos cuenta que Sade retrató de forma casi exacta la viciada sociedad del siglo XXI.

El trabajo escrito de Donatien Alphonse François de Sade también fue reconocido y alabado por grandes escritores latinoamericanos como Octavio Paz quien dedicó el poema “El prisionero”, Rafael Conte en su relato “Yo Sade” logro situarse dentro del alma del Marqués y Gonzalo Suárez escribió una novela en su honor titulada “Ciudadano Sade”.

Quizá hay escritores y lectores que aún no logran comprender la prosa hasta ahora inigualable del Marqués de Sade clasificándola como perversa e irracional, pero la comprensión de sus escritos varía según el enfoque de cada persona. Sade abre la puerta a lo demencial y exhibe los más oscuros deseos de la mente humana que pueden estar dentro de lo erótico, lo perverso y lo siniestro.

Para conocer y adentrarse dentro del magnífico trabajo literario que engendro El Marqués de Sade les recomiendo los siguientes textos: ‘Las 120 jornadas de Sodoma’, ‘Justin o los infortunios de la virtud’, ‘Juliette o las prosperidades del vicio’, ‘Los crímenes del amor’, ‘Historia de Aline y Valcour’, ‘Diálogo entre un sacerdote y un moribundo’, ‘Eugenia de Franval’, ‘La Marquesa de Gange’, ‘Filosofía en el tocador’ y ‘Oxtiern o las desdichas del libertinaje’. 

Les advierto que este autor tiene la habilidad de hacerte sentir incomodo con sus letras, pero al mismo tiempo te hace aprender y reflexionar sobre varias cuestiones de la vida, la sociedad y la política, la carga filosófica es impresionante, habla sobre temas muy controversiales para la época en la que fueron escritos y que lo siguen siendo en la actualidad como el aborto, la relación del ser humano con la naturaleza, la libertad sexual, la religión y el estado, mas allá de leerlo por morbo, se tiene que leer para comprender sobre la naturaleza humana.

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