En la Ciudad de México tenemos la fortuna de que haya impresionantes vitrales que aún podemos visitar. ¿Y en dónde está lo interesante? Los vitrales son obras hechas a mano con pedazos de vidrios de colores, esmaltados o policromados, unidos por varillas de plomo o cobre. Tienen fines decorativos, arquitectónicos o artísticos; los hay de muchos tamaños, desde objetos para adornar en casa hasta enormes telones de teatro. Aquí les presentamos una selección de hermosos ejemplos de esta técnica artesanal que decoran nuestra Ciudad.
1. Gran Hotel de la Ciudad de México
Este edificio se construyó durante el Porfiriato. Primero funcionó como tienda departamental y en los años 60 se convirtió en hotel justo a tiempo para los Juegos Olímpicos. Se encuentra a unos metros del Zócalo y es uno de los más bellos de la Ciudad. Su estilo arquitectónico es Art Nouveau con emblemáticos detalles: el candil Luis XV en la entrada, el elevador de rejilla, uno de los primeros en instalarse en México, y sobre el lobby, unos de los tres vitrales de domo tipo Tiffany más grandes del mundo. Realmente te transporta a otra época.
2. Vitrales del Alcázar del Castillo de Chapultepec
Estos enormes vitrales fueron hechos en París por encargo de Porfirio Díaz alrededor de 1900 y representan a cinco diosas de las mitologías griega y romana: Pomona (diosa de la fruta), Flora (flores, jardines y la primavera), Hebe (juventud), Diana (caza) y Ceres (agricultura, cosechas y fecundidad). Decoran uno de los pasillos del Alcázar del Castillo de Chapultepec, antigua residencia presidencial.
Pueden conocerlos junto con las habitaciones donde vivieron Maximiliano y Don Porfirio y el Museo Nacional de Historia que alberga el Castillo.
Para más información visita mnh.inah.gob.mx
3. El Palacio de Hierro
También en el Centro Histórico se encuentra la primera sucursal del Palacio de Hierro que abrió en 1891. De hecho el nombre de la tienda surgió porque es una construcción hecha con hierro fundido (como la Torre Eiffel), algo poco común para la época. Es tan grande que la gente pasaba para ver el ‘palacio hecho de hierro’ que se estaba construyendo. En 1914 el edificio se incendió y cuando lo arreglaron, mezclando estilos Art Nouveau y Art Decó, agregaron el impresionante vitral tipo domo sobre las escaleras eléctricas. El vitral lo diseñó el artista francés Jaques Gruber en 1921 (el mismo que diseñó el del Gran Hotel de la Ciudad de México) y fue armado en Francia.
4. Telón del Palacio de Bellas Artes
Durante casi 85 años, el Palacio de Bellas Artes ha sido escenario de lo mejor de la música, la ópera y la danza del mundo. Este ecléctico edificio fue diseñado por el Arquitecto italiano Adamo Boari a principios del siglo XX y terminado después de la Revolución. Uno de los detalles más impresionantes que tiene es la cortina de cristal del escenario de la Sala Principal. Compuesta por cerca de un millón de piezas de 2cm cada una, representa la vista del Popocatépetl y el Iztaccíhuatl como se veía desde las ventanas del Palacio. Basado en el trabajo de Boari, fue Harry Stoner quien lo concretó y encargó a Tiffany. La razón de contar con una cortina de vidrio era crear un telón protector en caso de incendio.
Para visitar la Sala Principal y conocer esta maravilla pueden hacer una visita guiada.
5. Vitrales de la Basílica de Guadalupe
Se crea o no en la religión católica, tenemos que aceptar que el edificio de la Basílica de Guadalupe es una sólida obra del Arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, y uno de los detalles que integró fueron vitrales diseñados con Fray Gabriel Chávez de la Mora. Fray Gabriel estudió Arquitectura y después se volvió sacerdote, creando en los años 60 un nuevo estilo de representación religiosa mucho más limpia. Los vitrales que realizaron para decorar la fachada de la Basílica fueron hechos con vidrio de Monterrey, para que por dentro y por fuera se vieran los colores (normalmente los vitrales se ven de colores por dentro, porque entra la luz de afuera y negros desde el exterior), además no son planos. Cada módulo tiene volumen para que la luz del sol pegue por todos sus lados y tenga más brillo.