Es verdad que irónicamente, no hay género más serio que la comedia, pues si esta no se hace en serio, el público luego luego se da cuenta que alguien trata de hacerse el chistoso y no cae bien, por ello, a lo largo de los años, hay varios exponentes del humor que arrancan carcajadas presentándose al natural.
La rutina cómica en las carpas
Aunque existen diferentes tipos de comicidad, la simple y natural es la que a muchos les gusta, por ello, para empezar, es importante remitirnos a las carpas, esos espectáculos de corte popular donde se dieron a conocer grandes figuras como Germán Valdés “Tin Tan”, Mario Moreno “Cantinflas”, Adalberto Martínez “Resortes” y Jesús Martín “Palillo”.
Dichos nombres, si bien, trabajaban con personajes fueron por decirlo de alguna manera los iniciadores de una forma de comedia que con el paso de los años iría ganando relevancia, pues ellos presentaban diversas rutinas donde el principal apoyo era la creatividad propia, pues no es lo mismo contar con un gran equipo de cine o televisión que estar cara a cara con el público.
Lo que empezó como contar chistes, poco a poco se fue volviendo una ventana para mostrar que estos comediantes tenían otros talentos como el canto y el baile y de esta manera se consolidaron en el gusto del respetable, esto posteriormente se integraría a lo que se conoce como teatro de revista, donde cada artista tenía la posibilidad de desarrollar una rutina, el auge de esta época en México se vivió en los 60´S, 70´S y parte de los 80´S cuando el Teatro Blanquita se volvió la casa de los mejores comediantes del país.
El éxito de las rutinas en los 80 y 90
Las décadas de los 80 y 90 brillaron con luz propia en varios sentidos y la comedia fue uno de ellos, ya que surgen principalmente dos nombres que hasta el día de hoy son referencia para muchos cómicos; me refiero a Jo Jo Jorge Falcón y Polo Polo.
Cada uno de ellos con una forma muy diferente de trabajar; el primero con un humor más familiar, mientras que Polo Polo (recientemente fallecido) era todo un as en cuanto al humor fuerte .
Si algo hace destacar a ambos es que no se valían de personajes para hacer reír al público. Este tipo de humor, aunque se vale de chistes, los cuentan de una manera que va más a la anécdota que al chascarrillo, y a partir de ellos, nace una generación de humoristas entre los que podemos mencionar a Teo González y Carlos Eduardo Rico, quienes de alguna forma emularon un poco más el estilo de Falcón.
Sin embargo, fue en 1995 cuando de un programa que comenzó a hacer ruido llamado Otro rollo nace una figura que puso de moda la comedia de monólogo, él es Adal Ramones.
Adal empezó a hacer monólogos como un segmento de la emisión que además de conducir producía y este bloque tuvo cada vez más aceptación por parte del televidente, creando así una nueva forma, pues los comediantes que ya he mencionado antes, hacían sus shows con público en vivo en teatros, centros nocturnos o cabarets y él aunque sí trabajaba con público en el foro, llegar a miles de televidentes es una labor más compleja.
De tal forma, que en México, Adal se volvió el máster en materia de monólogo, pues después emprendió un espectáculo en vivo, el cual fue igualmente bien recibido por el público, y que hasta el día de hoy lo mantiene en el gusto de la audiencia.
El stand up, la forma moderna de hacer rutinas
Fue por ahí de 2008 cuando el concepto de stand up empezó a sonar fuerte en nuestro país, creo yo que el primer ejemplo fuerte fue El pelón en sus tiempos de cólera, un espectáculo donde Héctor Suárez Gomís narra pasajes de su vida de una forma cómica.
Sin embargo, comenzó una moda de hacer reír de forma más simple, presentándose en pequeños bares y en algunas ocasiones haciéndose acompañar por instrumentos, surgiendo así el boom del stand up.
A lo largo de estos últimos años han aparecido varios standuperos que con una comedia sin pretensiones se han ganado el cariño, la admiración y sobre todo la risa de su público, pero lo que llama la atención es que en algunos casos no solamente es subirse al escenario para sacar una o muchas carcajadas, sino que se ha vuelto espacio para la comedia inclusiva, en este sentido, vemos que cada vez más mujeres miembros de la comunidad LGBT se animan a tomar el micrófono y a partir de sus experiencias personales generan humor.
Nombres como Daniel Sosa, Ricardo O´Farril, Sofía Niño de Rivera, Manuna, Gon Curiel, Mau Nieto o Pedro Palacios destacan en el mundo del stand up, pero si hay un verdadero referente que ha roto fronteras y que se ha ganado un lugar muy importante en el complejo mundo del humor, es sin duda Franco Escamilla, quien a mi modo de ver, revolucionó y le dio una nueva significación al oficio del comediante, pues con su espectáculo se ha presentado en los mejores recintos no sólo de México sino de otros países, sitios que usualmente están destinados a cantantes o grandes espectáculos.
De modo tal, que a pesar de que el término como tal stand up es relativamente nuevo, nos podemos dar cuenta que más bien, es una evolución que han tenido las rutinas cómicas que se han hecho desde siempre y que ha sido una forma que ha sobrevivido al paso de los años adaptándose a las necesidades tanto del humor mismo como de la sociedad.