Agosto recibió a México con un video de una golpiza hacia un ladrón en una combi que se dirigía al Estado de México. En redes sociales se mostró una aprobación tal, que se celebró y se presumió como lo mejor que se ha visto durante la cuarentena. Aunque este no es el primer caso de justicia por mano propia que se ve por parte de la población mexicana, y según los reportes, los casos han ido en aumento.
En un texto publicado por LAPOP 2010, ‘Perspectivas desde el Barómetro de las Américas’, se menciona que en México, de 1984 al 2001 hubieron al menos 294 casos de linchamiento o intentos de linchamiento. Y como un dato reciente, en un artículo publicado por CNN Español de Mayo del 2019, se reporta por la CNDH, un registro de 43 casos en el 2015, 59 en el 2016, 60 en el 2017, 174 en el 2018 y 67 hasta mayo del 2019; este último, tan solo en el quinto mes del 2019.
El artículo 17 constitucional establece que “ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma” y que “toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales”. Lo cierto es que la mayoría de las leyes parecen utópicas si se comparan con la realidad. La última cifra negra o dato de delitos no denunciados en México por el INEGI es del 2018, donde declara que en ese año solamente el 10.6% de los delitos fueron denunciados, de los cuales se inició averiguación previa o carpeta de investigación en solo 63.9% de esos casos.
Las razones que los mexicanos argumentaron para no denunciar, son: pérdida de tiempo con 31.7%, desconfianza en la autoridad con 17.4%, trámites largos y difíciles con 8.9%, actitud hostil por parte de la autoridad con 4.3% y miedo a la extorsión con 0.8%.
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Tomando en cuenta lo anterior, la población mexicana no denuncia y cuando lo hace, gran parte de los casos no son solucionados. Los mexicanos no se explican que después de denunciar, deben pasar un calvario en el proceso penal, al enfrentar cara a cara al delincuente y temer por su vida debido a las amenazas que reciben. Como se menciona, los mexicanos mayoritariamente no denuncian pues piensan que es una pérdida de tiempo, ya que después de los tramites largos y enredados, no obtendrán respuesta y mucho menos justicia. Es aún más injusto que a personas con poder en los medios o en el gobierno, les resuelven los delitos rápido, en esos casos si encuentran al culpable, lo hacen viral y se obtiene justicia; pero para la población en general, hay mala atención por parte de los funcionarios y no hay justicia.
¿Cómo denunciar el robo de un celular, si antes de terminar el trámite, se puede sufrir otro asalto? Existen muchos mexicanos motivados, que deciden poner una denuncia y tienen esperanza en que de a poco se empieza, para cambiar la situación que le aqueja al país. Pero al tener una mala experiencia, simplemente no lo vuelven a hacer y además recomiendan no hacerlo.
Analizando más la situación, es triste pensar que los mexicanos disfrutan ver como se le golpea o mata a una persona. Pero es parte de la desesperación que se tiene por parte de la población al ver que no existe la justicia. Y que desgraciadamente, la situación económica de las víctimas de robo no son necesariamente superiores a las del ladrón. Hablamos de mexicanos, con carencias económicas, que tienen largas jornadas laborales, que invierten más de dos horas en el transporte y que al final las cosas que ganan con tanto esfuerzo, se le son arrebatadas. Por otra parte, resulta importante mencionar que otros linchamientos son ocasionados por delincuentes que violan, secuestran o matan; un robo, la mayoría de las veces queda solamente en la molestia que ocasiona, pero la idea de perder a un ser querido, ha hecho que la gente haga justicia por su propia mano. Y esta idea se vuelve peligrosa, ya que se han reportado casos de linchamientos hacia personas que eran inocentes.
Además con las redes sociales se tiene más difusión de estos actos y esto puede incitar a más personas a hacerlo. Existen muchos artículos especialmente escritos por la CNDH que abordan el tema de la justicia por mano propia en México y lo incorrecto que es. Se hace un análisis profundo de la situación, pero las autoridades no actúan para cambiar esta situación. Además de los casos de gente inocente que es linchada. Esta grave consecuencia es evidente, ya que las personas que deciden hacer justicia por mano propia no están calificadas para hacer una investigación y así llegar a la persona culpable. Definitivamente el gobierno debe reforzar sus estrategias para que más mexicanos decidan denunciar y para que sus procedimientos judiciales sean efectivos, ya que de lo contrario, más gente puede resultar asesinada cuando era inocente.