La semana pasada Netflix estrenó el documental de la lucha de la activista Marisela Escobedo, quien murió buscando justicia por el feminicidio de su hija Rubí. ‘Las Tres muertes de Marisela Escobedo’ es una historia cruda que te helará la sangre, te llenará los ojos de lágrimas y el alma de rabia, porque en México el 97% de feminicidios quedan impunes.
Marisol Rubí Frayre Escobedo de 16 años, fue brutalmente asesinada en 2008 en Ciudad Juérez, Chihuahua. Abandonaron su cuerpo en un basurero y le prendieron fuego. El responsable fue su pareja Sergio Rafael Berraza, quien a pesar de confesar su culpabilidad ante un tribunal, fue absuelto de todos los cargos. La madre de Rubí, Marisela Escobedo, no descansó ni un solo día exigiendo justicia por el feminicidio de su hija. Pronto, ella se convirtió en el rostro de la lucha por la justicia no solo en Chihuahua, sino en todo el país.
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El documental cuenta con algunas entrevistas hechas a Marisela, las cuales ayudan a narrar parte de esta historia, también participan sus hijos, representantes legales de la familia y amigos cercanos. Es un trabajo detallado, que logra hacerte empatizar con la lucha de una madre que solo buscaba que su hija no se convirtiera en una asesinada más.
«A Rubí la mataron dos veces; la primera cuando le quitaron la vida y la abandonaron en un basurero, la segunda cuando absolvieron a su asesino».
Durante su búsqueda de justicia, Marisela expuso los problemas de corrupción que existen en el sistema de justicia mexicano. Esto la llevó a ser blanco no solo del crimen organizado, también de los supuestos funcionarios que debían protegerla.
Tras dos años de perseguir la justicia sin descanso, Marisela Escobedo fue asesinada frente al Palacio de Gobierno Chihuahua. Un hombre le disparó en la cabeza, nadie pudo ayudarla. Pero su voz nunca se apagó y se escucha todavía en cada grito exigiendo justicia, es un símbolo viviente de lucha en contra de la violencia que viven día a día las mujeres.
«Si me va a venir este hombre a asesinar, que me venga a matar aquí, para vergüenza del Gobierno”
El caso de feminicidio de Rubí fue cerrado y sus familiares fueron obligados a huir del país para no tener el mismo final que Marisela. Ella fue una madre, con un profundo amor por su hija, que dio su vida buscando el simple significado de la justicia. Fue asesinada tres veces, ignorada y perseguida por el Estado. Pero su ejemplo ahora es el estandarte del movimiento que busca ponerle fin a la ola de feminicidios que ocurre en nuestro país, porque después de tantos años, siguen repitiéndose de manera constante, arropados por un sistema lleno de injusticia e impunidad.
El documental se estrenó en Netflix el pasado 14 de octubre, porque su causa está más viva que nunca.
