La industria del entretenimiento ha sido considerada por bastante tiempo como perpetuadora de estereotipos. Si bien es cierto que se han buscado perfiles —altos, con rasgos anglosajones, cuerpos musculosos para los hombres y delgados para las mujeres— lo cierto es que cada vez más la diversidad se está haciendo espacio en el cine (Halley Bailey será la nueva sirenita), la televisión (con personajes protagonistas no heterosexuales como The Politician), y por supuesto la música.
Es este último campo el que atrae nuestra atención en esta ocasión, pues desde Detroit, Estados Unidos, llegó una artista rompedora de esquemas y protectora de minorías: nos referimos a Melissa Viviane Jefferson, mejor conocida como Lizzo. Por ello, y para iniciar febrero con el pie derecho, acompáñanos a revisar los motivos por los que deberías de seguir a esta cantante.
Una historia de resistencia
Lizzo estaba consciente de que no encajaba en los cánones de la industria musical, pero ella segura de si misma y de su talento decidió no rendirse y cumplir su sueño de ser una cantante reconocida. Para ello se matriculó en la licenciatura de Música Clásica en la Universidad de Houston. No obstante, el fallecimiento de su padre en 2009, sumado a problemas económicos ocasionó que la joven abandonara sus estudios y dos años después se mudó a Minneapolis, donde comenzó a tocar con varios grupos de soul, hasta que consiguió llamar la atención del sello independiente Totally Gross National Product.
Artista que no le tiene miedo al cambio
Bajo Totally Gross National Product Lizzo público dos álbumes Lizzobangers (2013) y Big Grrrl Small World (2015), pertenecientes al rap y hip hop, y que le valieron la atención de la crítica; de hecho, tras el lanzamiento de su primer disco la revisa Time la incluyó en la lista de artistas que seguir en el 2014. Con toda la atención que recibía su trabajo, su talento fue percibido por Atlantic Records, disquera que le ofreció un contrato en 2016.
Lo anterior fue percibido por Lizzo como un nuevo comienzo y sin miedo a cambiar de género musical lanzó su primer EP, Coconut Oil, el cuál incluyó el sencillo que ahora es un éxito, pero al momento de su lanzamiento no llamó la atención: Good as Hell. El talento y la versatilidad de esta artista ocasionaron que triunfara en su nueva faceta de cantante pop y soul. De hecho, la Revista Rolling Stone nombró a Coconut Oil como uno de los mejores álbumes pop de 2016.
Agradecida con sus fans por la fama
El éxito le llegó a esta mujer en 2019, pues después de ser telonera de Florence and The Machine y Haim, una de sus canciones, Juice, ingresó en enero al Billboard Hot 100 (alcanzó el puesto 82). Al mismo tiempo su canción Truth Hurts, lanzada en 2017, alcanzó el #1 del Billboard, después de ser incluida en la película de Netflix, Alguien Especial. Misma atención recibió Good as Hell, aunque no logró alcanzar la primera posición del top.
Como una forma de agradecimiento por la revitalización de su trabajo anterior, Lizzo grabó nuevos vídeos musicales para los sencillos más populares. Sin duda, una gran muestra de agradecimiento para los fans.
Positividad, inclusión y cuerpos diversos
Las canciones de Lizzo son una oda a la aceptación, la positividad y la inclusión. En sus redes sociales la cantante constantemente lanza mensajes de amarse a sí mismo y esto es adaptado e incorporado a sus letras. En una industria donde la mayor parte de las personas cumplen con ciertas características es increíble ver como una artista diferente se ama y busca contagiar aceptación a través de su obra. Si estas teniendo un mal día reproduce Juice: subida de ánimo garantizada.
En todas las plataformas y en todas las industrias
En sus redes sociales la cantante se caracteriza por un estilo ácido y juguetón, demostrando que ella no es otro cuerpo de consumo para la industria. Así, reapropiándose de palabras ofensivas o empleando groserías (especialmente bictch), Lizzo bombardea a sus seguidores con pura buena vibra y noticias alegres, amén de los mencionados mensajes motivacionales. Por si esto fuera poco, en la película Estafadoras de Wall Street, la estadounidense realizó un cameo. Sin duda, talento en toda la extensión de la palabra.
De aprendiz de flauta a la Artista de 2019
Lizzo sabe tocar la flauta y en más de una entrevista ha agradecido al profesor que le animó a esforzarse por dominar el instrumento que es icónico durante sus presentaciones. Nunca dejó de crecer, aprender y creer en sus sueños y, con la revisión de todo lo anterior no cabe la menor duda del motivo por el que la revista Time la nombró la Artista del Año 2019.
Por estas y muchas otras razones que no enumeramos en esta lista —su aparición en la décima temporada de RuPaul’s Drag Race, su incursión en el mundo del cine al prestar su voz para la película UglyDolls: Extraordinariamente feos, los problemas económicos y perdidas a las que se sobrepuso y un larguísimo etcétera— deberías de seguir a Lizzo, una cantante que rompe esquemas en todo lo que hace.