Final Fantasy es una de las sagas de videojuegos más conocida y longeva del mundo de los videojuegos, contando actualmente con una amplia lista de títulos lanzados en la mayoría de las consolas más populares a partir de 1987: desde el Nintendo Entertainment System (NES), hasta el Play Station 4.
Sin embargo, desde el primer juego de Final Fantasy en 1987 y hasta su sexta entrega en 1994, Squaresoft (hoy conocida como Square Enix), empresa desarrolladora de la saga, se había mantenido fiel a Nintendo, lanzando todos sus títulos de manera exclusiva para sus consolas. No obstante, a partir de la séptima entrega, Squaresoft decidió mudarse a PlayStation, la nueva consola de Sony y competencia directa de Nintendo. Esto fue algo sorprendente, pues todos esperaban que Final Fantasy VII saliera para la nueva consola de Nintendo en esos tiempos, el Nintendo 64.
Es importante recordar que Play Station existe gracias a Nintendo; Sony y Nintendo llevaban algún tiempo colaborado en la creación de consolas, la primer ocasión fue cuando Sony fabricó un chip de sonido para el Super Nintendo. Posteriormente, Nintendo volvió a recurrir a Sony para la creación de un periférico que permitiera la incorporación de CDs al Super Nintendo que sería llamado SNES CD.
Sony accedió de nueva cuenta a la colaboración, y en 1988 se firmó un acuerdo que tendría 2 grandes resultados: por un lado un periférico que serviría como aditamento externo que le añadiría al Super Nintendo un lector de CDs, y por el otro una consola creada totalmente por Sony que tendría la capacidad de reproducir tanto CDs como cartuchos de Super Nintendo y sería llamada Play Station. El eje central de la idea era darle vida extra al Super Nintendo, ofreciendo este nuevo periférico para la gente que ya tuviera la consola, mientras que se ofrecía una nueva consola con las mismas capacidades a la gente que buscara adquirir una.
Desgraciadamente, Nintendo cambió de opinión en el último momento al darse cuenta que en el acuerdo que se había firmado se le daba a Sony control total sobre el nuevo formato, Super Disc, lo que provocaría que los desarrolladores tendrían que pagarle a dicha compañía si querían desarrollar usando el CD. Nintendo vió esto como una potencial pérdida de ganancias bastante fuerte, pues los ingresos que generaban las licencias para los desarrolladores iban a pasar al campo de Sony, por lo que decidió terminar con el acuerdo cuanto antes. Sin embargo, Sony logró quedarse con los derechos del hardware y creó el primer PlayStation.
En la época previa al lanzamiento de Final Fantasy VII, a mediados de la década de los noventa, el mundo de los videojuegos se encontraba en transición, dando el salto de los 16 bits a los 64 bits, lo que permitiría ofrecer gráficas tridimensionales. Nintendo lanzó su Nintendo 64, mientras que Sony el PlayStation. Squaresoft no podía quedarse atrás en esto, por lo que también quiso dar el salto y comenzó a hacer pruebas con la nueva tecnología de 64 bits.
Naturalmente, Nintendo esperaba que Squaresoft lanzara Final Fantasy VII en su Nintendo 64, sin embargo, Squaresoft encontró un inconveniente crucial con esta nueva consola: el uso de cartuchos. Nintendo no quería dejar de usarlos, y el nuevo proyecto de Squaresoft era bastante ambicioso, por lo que hacer que el juego cupiera dentro de un solo cartucho era una tarea imposible, lo que provocó que voltearan a ver a PlayStation y a sus CDs.
Hironobu Sakaguchi, productor y vicepresidente ejecutivo de Square Japan, Jefe de Square USA comentó en una entrevista a Polygon en donde se habló sobre el desarrollo de Final Fantasy VII: “En ese momento yo no era presidente de Square. Había un nivel por encima de mí, y hablé con ellos para tomar la decisión. Pero el factor de los CDs en Playstation era importante. Si querían hacer un juego de acción 3D en Nintendo 64 con el espacio limitado del cartucho, podía hacerse, pero yo quería crear un juego de rol en 3D. Estaba muy claro en mi cabeza y quería hacerlo, pero era difícil con el hardware de Nintendo…el mayor problema era, por supuesto, la memoria. De acuerdo a nuestros cálculos, no había manera de que pudiésemos guardarlo todo en un cartucho. Nuestra principal razón para escoger Playstation fue el hecho de que la consola permitía usar los CD-ROM.”
Así pues, Final Fantasy VII fue estrenado en 1997 y se convirtió en el primer título de la saga en ser lanzado fuera de una consola de Nintendo, siendo el más ambicioso y grande hasta ese momento al ofrecer más de 40 horas de juego. Además, es probablemente el más icónico de la saga y el favorito de muchos, tanto que acaba de recibir un remake recientemente, el primero en la historia de Final Fantasy.