Durante la revolución cultural China el arte era una herramienta propagandística del partido comunista, demarcado por la estética y temáticas del realismo socialista, pero tras las reformas de apertura impulsadas por Deng Xiaoping (en 1978), muchos artistas se acercaron a las manifestaciones artísticas occidentales, viendo surgir así, hacia finales de los setenta y en la década de los ochenta, movimientos como Xiamen Dada, Star Group y el New Wave.
Las protestas de la plaza de Tiananmen en 1989 dieron paso a movimientos altamente politizados y críticos del gobierno y la sociedad china como el realismo cínico, el East Village o el Pop político que también basaban sus propuestas artísticas en el arte occidental.
Si bien durante sus inicios el arte contemporáneo chino estuvo asociado a la subversión, a finales de los noventas comenzó a ganar mayor aceptación por parte del gobierno y fue mayormente apoyado y difundido internacionalmente, sobre todo a partir de la entrada del nuevo milenio y las transformaciones económicas y culturales que este trajo consigo para el país asiático, como la admisión en la Organización Mundial de Comercio en 2001 y las influencias de la globalización. De igual manera el arte chino comenzó a generar un gran interés en las galerías, museos, colecciones y mercados de todo el mundo.
Estos entramados históricos al igual que las tensiones culturales e identitarias entre oriente y occidente y entre la tradición y la modernización han sido algunos de los puntos clave que han demarcado el desenvolvimiento del arte contemporáneo en China, y que se ven reflejadas en algunos de los representantes más prominentes de este escenario que te mostramos a continuación.
1. Zhang Huan
El trabajo artístico de Zhang Huan se centra en el uso del cuerpo como medio de expresión y como un recurso para conocer el entorno y al individuo mismo. La condición física para este artista es también una manera de acercarse a un entendimiento de la espiritualidad.
Zhang reflexiona constantemente sobre la identidad y la tradición oriental en relación a la contemporaneidad occidental. Al ser un artista oriental que emigró a los Estados Unidos en 1998, su obra se ha visto influenciada por el choque cultural que supuso esta migración.
Zhang cuestiona a menudo el gobierno chino y su obra está cargada con un fuerte sentido intelectual, religioso y político. Debido a la radicalidad estética y conceptual de su trabajo, ha llegado a enfrentar problemas con las autoridades de su país.
Zhang Huan nació en la ciudad de Anyang, China en 1965. Egresó de la Universidad de Henan en Kai Feng en 1998 y obtuvo una maestría por la Academia Central de Bellas Artes de Beijing en 1993. Aunque comenzó incursionando en la pintura, al terminar sus estudios se volcó rápidamente hacia el performance y el registro fotográfico.
2. Yue Minjun
Las pinturas y esculturas de Yue Minjun tienen un distintivo inconfundible que se ha vuelto característico de sus obras: los autorretratos de este artista, emplazados en distintas situaciones y contextos, esbozan siempre una prominente, caricaturesca, e inquietante sonrisa. La risa es un elemento con el que el artista busca representar una visión crítica de la sociedad y la cultura que lo rodea, es un arma revolucionaria con la cual plantar cara a la indiferencia humana; la única manera de hacer frente a las atrocidades de la realidad actual.
“Es por eso que elijo pintar la risa, para trasmitir una sensación de placer y felicidad, pero que, en realidad, esconde una doble visión respecto al dramatismo y al sufrimiento”.
Yue Minjun creció durante la revolución cultural, hecho que marcó su trayectoria como la de muchos otros artistas de esa generación. Nació en 1962 en Heilongjian, China. Estudió en la Universidad Normal de Heibei en la década de los 80. Actualmente radica en Beijing, China.
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3. Cai Guo-Qiang
Bastante reconocido por sus trabajos con pólvora, Cai Guo-Qiang explora las propiedades de este explosivo en su obra para transmutar su sentido bélico y destructivo en uno creativo y artístico. Entre 1986 y 1995 comenzó a implementar la pólvora en su obra como una incitación a la espontaneidad, esto lo llevo a experimentar con explosivos a mayor escala y a convertir las explosiones y el fuego en un elemento característico de su trabajo artístico.
Para Cai Guo-Qiang la pólvora es un elemento de trabajo espiritual en cuanto que es de una naturaleza difícil de dominar y de predecir, este artista conecta su voluntad creativa con la fuerza y la indomabilidad de este material.
Cai nació en 1957 en Quanzhou, China, estudió escenografía en la Academia de Teatro de Shanghai lo que posteriormente repercutiría en el papel de la composición espacial, la interacción con el público y la diversidad de materiales en su trabajo. La obra de Cai también se vale del video, la escultura, la instalación y el dibujo como medios de creación.
En 2008 presentó obras con fuegos artificiales durante las ceremonias de apertura y clausura de los juegos olímpicos en Beijing. En 2013 su exposición Da Vinci do Povo en Brasil fue la exposición más visitada de un artista vivo con más de un millón de visitantes. Actualmente vive y trabaja en la ciudad de Nueva York.
4. Cao Fei
Se graduó de la Academia de Bellas Artes de Guangzhou en 2001. Su trabajo, basado en el video y los medios digitales, reflexiona sobre las vertiginosas transformaciones sociales y culturales de la china contemporánea. Las interacciones entre la realidad y la fantasía, la utopía y la distopia, el cuerpo y la tecnología suelen ser algunos otros de los tópicos que la artista suele abordar en su obra.
Nacida en Guangzho, China en 1978, la revolución cultural ha sido un factor de la cultura y sociedad china que ha repercutido en su trabajo.
En su obra RMB City (2007) la artista desarrolló una ciudad virtual en el videojuego Second Life, donde documenta la vida de su avatar China Tracy sobre una visión urbana de cómo sería su país en el futuro.
En COSPlayers (2004) se adentra en una comunidad de jóvenes chinos que se reúnen para vestirse como personajes de anime y pasear por el entorno industrial de Guangzhou.
5. Zhang Xiaogang
Nació en 1958, en la ciudad de Kunming, China. Las pinturas de Zhang se caracterizan por mostrar retratos estilizados de personas chinas en alusión a la historia y la familia, los rostros inexpresivos y rígidos de sus retratos encuentran inspiración el movimiento surrealista.
En 1982 se graduó de la Academia de Bellas Artes de Sichuan tras lo cual comenzó a trabajar como obrero en construcción al no obtener un puesto de enseñanza en pintura. Durante esta época Zhang vivió una profunda depresión acompañada por el alcoholismo, lo que lo llevó a su hospitalización en 1984. En 1985 se unió al movimiento New Wave, que vio una explosión filosófica, artística e intelectual en la cultura china. Siendo parte de la vanguardia artística, en 1986 Zhang Xiaogang formó el South West Group que exploraba cuestiones sobre la individualidad en una sociedad marcada por el colectivismo.
Su serie de pinturas más famosa Bloodline: Big Family fue presentada por primera vez en 1995 en una exposición titulada The Other Face: Three Chinese Artist presentada durante el 46 centenario de la Bienal de Venecia. Las pinturas están inspiradas en los retratos familiares característicos de la década de los 80.
6. Liu Xiaodond
Es un pintor figurativo asociado al movimiento neorrealista chino de la década de los noventa. Considerado un pintor de la vida moderna, sus cuadros son en su mayoría retratos de amigos, familiares y conocidos frente a los que pretende realizar una representación personal y cercana al tiempo que captura su entorno y sus condiciones de vida. Su intención es narrar una historia personal detrás de cada pintura.
Liu Xiaodong nació en Liaoning, China en 1963, a la temprana edad de once años comenzó a pintar. Su formación artística profesional estuvo dada por la Facultad Central de Bellas Artes de China y posteriormente por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid. Al regresar a su país tras sus estudios en Europa se convirtió en profesor de pintura en la Facultad Central de Bellas Artes, la misma en la que se formó.
Liu considera que un artista es una persona que se ha trascendido a sí misma y tiene la capacidad de ayudar a otras a trascenderse a través de su arte.
7. Yang Fudong
Nació en Beijing en 1971, se graduó de la Academia China de Bellas Artes en el departamento de pintura al óleo en Hangzhou (1995). Es considerado uno de los artistas chinos más influyentes en la actualidad. Tras terminar su formación académica, Yang se aproximó a la fotografía y la filmación.
A través de su trabajo artístico Yang Fudong explora temas sociales, históricos y políticos. Caracterizado por la no linealidad, su fascinación por la abstracción y la fragmentación, las películas de Yang suelen presentarse sobre múltiples pantallas que muestran una escena distinta pero que producen una narrativa en conjunto, aportando una complejidad poética y formal inusitada.
Característico de su obra es el tratamiento de las escenas en blanco y negro, la temática urbana, así como la relación entre la tradición y las nuevas formas de vida en China.
Ha presentado exposiciones alrededor de todo el mundo y su trabajo se encuentra en colecciones como las del Museo Solom R. Guggenheim de Nueva York, el Museo de Arte Contemporáneo Castello di Rivolli en Torino y el Museo de Arte Contemporáneo de Amberes, entre otros.
8. Zeng Fanzhi
Nació en 1964 en Wuhan, China. Estudió en la Academia Hubei de Bellas Artes (1987-1991) donde fue fuertemente influenciado por el expresionismo alemán.
La psicología y la emotividad son algunas de las características más señaladas dentro de su obra pictórica: con trazos fuertes, figuras ironizadas y contrastes de color y luces enérgicos, así como proporciones humanadas exageradas, Zeng muestra una impronta temperamental en su trabajo comúnmente asociada a una visión desesperanzada de la vida y las relaciones humanas. La revolución cultural china fue un periodo importante de su juventud que explora críticamente en su obra a través de la representación de la cultura y la sociedad contemporánea del país asiático.
Para este artista la técnica y el proceso práctico es un aspecto fundamental del trabajo artístico al fundirse en un mismo elemento junto con el pensamiento; la mano y el corazón.
“La técnica no es sólo sobre un nivel de habilidad básico, puedes usarla para conseguir un mayor nivel de espiritualidad y artisticidad”.
9. Qiu Zhijie
Nació en Fujian, China en 1969. Desde muy temprana edad ha practicado la caligrafía china y ésta se ha vuelto un recurso central dentro de su actividad artística. Qiu Zhijie estudió en la Academia de Bellas Artes de Zhejiang (ahora Academia de Arte de China) y se graduó en 1992.
El trabajo de este artista es considerado una especie de fusión entre la tradición literaria y pictórica china con el arte contemporáneo y la crítica social. Constantemente explora el tema de la transitoriedad y la lucha de la autoafirmación frente a la historia china, en su obra suele cuestionar los fundamentos culturales de la china contemporánea.
Aunque Qiu emplea el video, la fotografía, la instalación y el performance, es particularmente conocido por sus mapas: este artista suele definirse a sí mismo como un mapper (mapero) ya que gran parte de su obra está realizada en esta forma particular de creación pues en ella ve la capacidad de concentrar todas sus vertientes profesionales y expresivas. En su obra Art and China after 1989: Theater of the World (2007) reconstruye varias décadas de arte contemporáneo chino a través de la forma de un paisaje, en el que, además del trayecto de las prácticas artísticas de su país, están representadas también las condiciones sociales y políticas de China e incluso el ámbito internacional.
10. Xu Bing
Nació en Chongqing, China en 1955. Se graduó de la Academia Central de Bellas Artes en Beijing en 1981. Fue nombrado vicepresidente de esta misma escuela en 2008.
La obra de Xu Bing es particularmente conocida por la manipulación y subversión que hace de los sistemas de la escritura y el lenguaje, este artista nos invita constantemente a reflexionar sobre el lenguaje y sus significados, así como los medios por los que se disemina. Para Xu, no hay una verdadera diferenciación entre el lenguaje escrito y el dibujo.
En 1994 inventó una serie de palabras a partir de modificar la forma de las letras del vocabulario inglés para que parecieran trazos de caligrafía tradicional china. Años antes en 1988 presentó su monumental instalación Book From the Sky en la que inventó, talló sobre madera e imprimió 4,000 caracteres chinos inéditos en pergaminos y libros, como una manera de reflexionar sobre la naturaleza del lenguaje y de la provocación que puede significar la alteración de un signo identitario tan fuerte como la lengua.
Después de las protestas de la plaza de Tiananmen y debido al hostil ambiente político y la censura artística, la obra de Xu Bing fue víctima del escrutinio del gobierno chino y producto de una dura crítica oficial.
Considerado un gran representante del New Wave en China, el trabajo de este artista entrelaza la tradición y el arte conceptual en su producción.
